Como Polvo en el viento, la novela del exilio cubano
En La novela de mi vida (donde narra la historia del poeta cubano José María Heredia, 1803-1839) el escritor de la misma nacionalidad, Leonardo Padura (autor de El hombre que amaba a los perros), ya planteaba el problema del exilio de los cubanos y de sus imbricaciones morales y emocionales...
En ella, el exiliado Fernando va en busca de un manuscrito con la autobiografía del gran poeta romántico, desterrado de por vida por el gobierno español, a causa de haberse involucrado en la primera conspiración de independencia de su país, a principios del siglo XIX...
En ese manuscrito, cuenta el éxodo de José María Heredia, su nostalgia y sufrimiento por la patria perdida, que lo lleva a Nueva York primero y luego a México, donde finalmente transcurre su vida, se casa y muere...
Heredia escribiría sobre su exilio: “Por más que a lo largo de los años traté de convertir aquel país (México) en mío, siempre me había tentado como un vicio perverso el deseo de volver a Cuba, precisamente a Cuba el único lugar del mundo donde no podía volver... Quizás fue ése el gran error de mi existencia, o quizás todo fue así porque yo era incapaz de ser de otro modo y estaba predestinado a inventar el destierro de Cuba, la nostalgia por Cuba, el sueño de la libertad de Cuba”...
En la última novela de Padura, Como polvo en el viento, el escritor vuelve sobre el tema del exilio. ¿Por qué los cubanos abandonan la isla aun amándola? ¿Por qué arriesgan su vida para salir de allí? Cuba se encuentra a 145 kilómetros al Sur de la Florida, Estados Unidos. Cifras oficiales indican que cerca de 600 mil cubanos emigraron de la isla desde la llamada “Crisis de los balseros” de 1994 hasta 2015. Según la ONU, el número de migrantes cubanos es de un millón 654mil 684 personas, es decir de 14.59% de la población cubana. Los destinos de los migrantes son: Estados Unidos (80.82%), España (8.55%) e Italia (2.25%).
A lo largo de 650 páginas, Padura plantea el problema del exilio, tratándolo de explicar y comprender a través de la construcción de las vidas de varios de sus personajes que por diversas causas personales abandonan la isla pero que están unidos a ella por la emoción y el sentimiento. Cuba es su amor, su maldición.
Un pensamiento de Adela, la hija norteamericana de la fugitiva cubana Elisa, hace el planteamiento de la tesis del libro: “Adela comenzó por comprobar que la relación sanguínea de su amante (Marcos), con su idiosincrasia y su cultura de origen parecía ser impermeable al territorio donde ahora vivía, aun tratándose de Hialeah, ¿por qué una persona así sale de su país? ¿Por qué alguien se aleja de su país sin salir de él? (…) Hasta donde Adela conocía, Marcos no tenía ideas políticas tan radicales como para verse visto obligado a optar por el exilio ni había sentido en la isla la necesidad de cambiar su vida por un contexto cultural diferente"…
Esta novela nos descubre a la Cuba actual, con sus fallas y aciertos políticos y sociales y el modo de ser de los cubanos, solidarios, sentimentales, quienes a pesar del exilio llevan a Cuba en el corazón.
