Gobiernos van y vienen, no importa su color o ideología, pero desde hace más de tres lustros, cada vez que se discute el Presupuesto de Egresos de la Federación el tema de asignar más recursos a los medios públicos es recurrente, y por más que se le explique a la comisión legislativa del ramo la importancia de mayor presupuesto para la convergencia tecnológica, esta hace oídos sordos o de plano no entiende.
Por ello, en tiempos presupuestales, casi todas las instancias de gobierno están en ascuas, y más en las circunstancias en las que se encuentra la actual negociación del Presupuesto de Egresos 2020, pues priva el principio de austeridad, la reorientación del gasto público hacia los programas insignia y las obras emblemáticas del nuevo gobierno, sin dejar de lado la exigencia de los partidos de oposición y de los propios legisladores del partido dominante que atraviesa por una crisis en la definición de su liderazgo.
El Instituto Mexicano de la Radio, Radio Educación, Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, Canal 11, Canal 22 y Notimex, todos medios públicos federales, se sumaron a la austeridad republicana desde que llegó la 4T y tuvieron una disminución presupuestal en 2019.
Para 2020, de acuerdo con el proyecto enviado y que será votado a marchas forzadas, tuvieron un ligero aumento respecto de 2019, aunque hay que esperar la votación final de los diputados.
Es particularmente relevante que algunos de los actuales directivos de los medios públicos los habían defendido desde la academia, y ahora que los dirigen, es indudable que encontrarán una salida a la escasez de recursos propia de cualquier economía, de la que no es ajena la Hacienda Pública.
Los nuevos tiempos obligan a “hacer más con menos”, a reestructurar su plantilla laboral, a impulsar la creatividad e ingenio para reducir costos, a acudir a compras consolidadas de contenidos, a generar un mayor impulso para la venta de sus contenidos y a realizar coproducciones que permitan mostrar eficiencia; en estas épocas, estar a expensas sólo del presupuesto es iluso.
INTERFERENCIAS
Una de las aportaciones de la llamada 4T es que en el mundo de las cifras cada quien tiene sus datos, y en esta ocasión Telmex no fue la excepción: señala que está en riesgo y sólo tiene 35 por ciento del mercado. Pero especialistas, como The Competitive Intelligence Unit, señala que en “términos de ingresos, obtiene 61.6 de cada 100 pesos generados en el sector, al segundo trimestre de 2019, elevándose trimestralmente para aproximarse al de 64.2 pesos de 2014, año de determinación de su carácter preponderante. Esta proporción es considerablemente mayor en el segmento móvil, al llegar a 74.1 pesos de cada 100; superior a la correspondiente a 2014, que era de 71.1 pesos”.
Las dudas surgen: ¿qué segmento está midiendo?, ¿por qué no cuadra con lo del órgano regulador?, ¿cuál es la intención de soltar cifras y expresar un riesgo?, pero, sobre todo, ¿qué tiene que decir el regulador en telecomunicaciones?
Muchas dudas, pocas respuestas; pero el sol no se tapa con un dedo: es más que evidente la preponderancia de Telmex.