Por: Javier Orozco Gómez
Desde hace unos años se comenta cuál será el futuro de los medios tradicionales (impresos y electrónicos), ante el crecimiento de nuevas plataformas de difusión; esta situación no ha impresionado a dichos medios, ya que han entendido los cambios y han buscado adaptarse a la realidad actual a través de sus portales de internet, para tener presencia en la telefonía móvil, apps o computadoras, además de estar presentes en Twitter y Facebook, para seguir siendo un referente.
Hoy en día se habla de la nueva generación 5G en conectividad móvil, que ha venido a revolucionar el envío de datos e, incluso, la transmisión de audio y video asociado, para lo que también se están preparando los medios tradicionales. Pese a ello no existe una política pública en México al respecto, y por razones socioeconómicas se siguen utilizando celulares de segunda, tercera y cuarta generación.
En el caso de la radiodifusión, pese a que se encuentra en franca desventaja frente a los servicios de streaming u OTT´S (Netflix, YouTube, Amazon y HBO Go) o para la radio (Spotify / Sirius XM), en el plano fiscal sigue teniendo la preferencia de las audiencias y son referente en el plano noticioso, como también por sus contenidos de entretenimiento las mediciones de empresas autorizadas muestran su permanencia y presencia.
Es posible que esta situación haya llevado al Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) a pretender que haya más estaciones, pues conforme al nuevo Programa de Bandas de Frecuencias 2019, publicado el 5 de marzo de 2019, se estarían ofertando y asignando (por las sociales y públicas) 137 nuevas estaciones de radio, 55 de FM y 11 de AM de carácter comercial, 50 de FM y 9 de AM de uso social y 12 de FM de uso público. En materia de televisión se proponen 75 nuevos canales, 50 de uso comercial, 15 de uso social y 10 de uso público.
El órgano regulador no debe perder de vista la experiencia que ha adquirido en otras licitaciones. Por ejemplo: la de estaciones de radio sonora (IFT-4) que acreditó que hubo un exceso de oferta; que hubo precios exorbitantes por nuevas, sin dejar de lado que participaron concursantes que encarecieron el precio de subasta como posible estrategia para obstaculizar la entrada a nuevos participantes, y que tuvo como efecto colateral que tales cantidades impactaran en el pago de los refrendos.
Para abril próximo se prevé someter a consulta pública las bases de la Licitación IFT-8 de frecuencias para radiodifusión sonora, por lo que para mediados de año podría iniciar dicho proceso.
INTERFERENCIAS
Será el lunes cuando el pleno del Ifetel resuelva sobre la fusión Disney-Fox, es claro que el interés público debe prevalecer para salvaguardar los derechos de las audiencias; no sobra señalar que conforme al artículo 63 de la Ley Federal de Competencia Económica una fusión no debe ser autorizada si pueden generarse efectos adversos para los consumidores o demandantes de los bienes o servicios. Así que a esperar la decisión.