/ jueves 6 de enero de 2022

Buenos propósitos, metas y objetivos para el 2022

Cuando pensamos en términos de proyectos nuevos iniciamos generalmente con una generación de ideas y poco a poco vamos depurando cada una de ellas hasta llegar a la que nos parece la más acertada y sobre esta idea final nos enfocamos para llegar a cumplir nuestro propósito de hacer realidad nuestro proyecto.

Al inicio de un nuevo año este tipo de proyectos inician con una serie de propósitos, algunos fácilmente alcanzables y otros no tanto, es por ello que no importa si se trata de proyectos profesionales o proyectos personales, nuestros propósitos deberían cumplir los requisitos de un buen objetivo, y deben ser ejecutados con una estrategia de por medio, de no hacerlo así nuestros propósitos no pasaran de ser buenos deseos que nunca llegaron a cristalizarse.

Es muy probable que profesionalmente yo quiera mejorar los resultados financieros de la empresa, alcanzar los presupuestos, obtener mejores utilidades para los accionistas, disminuir los costos, bajar los gastos, generar bienestar para los colaboradores, y por supuesto que a través de todo ello pueda mejorar mi calidad de vida; En cuanto a lo personal, es probable que tenga varios propósitos, cuidar mi salud, hacer ejercicio, bajar de peso, pasar más tiempo con mi familia, por mencionar solo algunos, así que con tantos propósitos en mente debo empezar por jerarquizarlos, asignar prioridades y definir el camino para alcanzarlos.

Lo más útil es como ya lo he mencionado, manejar mis propósitos tal como manejo mis objetivos, en primer lugar estableciendo propósitos que sean específicos para no desgastarme en lograr algo que no es claro el beneficio, en segundo lugar que sean medibles, para saber cómo voy durante el proceso y saber en qué grado los he alcanzado, en tercer lugar es precisamente que sean alcanzables, que estén a mi alcance y dentro de mis posibilidades, en cuarto lugar que sean propósitos relevantes, para que valga la pena dedicarles mi valioso tiempo y por último asignarle a cada uno de mis propósitos un tiempo para lograrlos, y no eternizarme con ellos.

Espero que cada quien dentro de sus posibilidades, de sus talentos y sobre todo con una estrategia adecuada pueda lograr lo que se proponga para este año que recién comienza, el panorama no es claro, lo pudimos ver al momento de hacer nuestros presupuestos en nuestras empresas, la incertidumbre del 2021 se está permeando al 2022, sin embargo hay que entrar con una actitud positiva y propositiva, estando seguros de que daremos nuestro máximo esfuerzo para lograr lo que nos proponemos.

Lo que está claro en muchas empresas es que “ No es válido el esfuerzo sino los resultados”, en el mundo empresarial nos regimos por resultados y solo los vamos a lograr si hacemos un verdadero esfuerzo al momento de prever lo que pudiéramos enfrentar, planear lo que queremos lograr, organizarnos internamente para trabajar como un verdadero equipo, integrándonos para aportar cada quien lo mejor que pueda ofrecer, dirigiendo el negocio por medio de metas y objetivos claros, y al final controlando todo lo que llevamos a cabo

Cuando pensamos en términos de proyectos nuevos iniciamos generalmente con una generación de ideas y poco a poco vamos depurando cada una de ellas hasta llegar a la que nos parece la más acertada y sobre esta idea final nos enfocamos para llegar a cumplir nuestro propósito de hacer realidad nuestro proyecto.

Al inicio de un nuevo año este tipo de proyectos inician con una serie de propósitos, algunos fácilmente alcanzables y otros no tanto, es por ello que no importa si se trata de proyectos profesionales o proyectos personales, nuestros propósitos deberían cumplir los requisitos de un buen objetivo, y deben ser ejecutados con una estrategia de por medio, de no hacerlo así nuestros propósitos no pasaran de ser buenos deseos que nunca llegaron a cristalizarse.

Es muy probable que profesionalmente yo quiera mejorar los resultados financieros de la empresa, alcanzar los presupuestos, obtener mejores utilidades para los accionistas, disminuir los costos, bajar los gastos, generar bienestar para los colaboradores, y por supuesto que a través de todo ello pueda mejorar mi calidad de vida; En cuanto a lo personal, es probable que tenga varios propósitos, cuidar mi salud, hacer ejercicio, bajar de peso, pasar más tiempo con mi familia, por mencionar solo algunos, así que con tantos propósitos en mente debo empezar por jerarquizarlos, asignar prioridades y definir el camino para alcanzarlos.

Lo más útil es como ya lo he mencionado, manejar mis propósitos tal como manejo mis objetivos, en primer lugar estableciendo propósitos que sean específicos para no desgastarme en lograr algo que no es claro el beneficio, en segundo lugar que sean medibles, para saber cómo voy durante el proceso y saber en qué grado los he alcanzado, en tercer lugar es precisamente que sean alcanzables, que estén a mi alcance y dentro de mis posibilidades, en cuarto lugar que sean propósitos relevantes, para que valga la pena dedicarles mi valioso tiempo y por último asignarle a cada uno de mis propósitos un tiempo para lograrlos, y no eternizarme con ellos.

Espero que cada quien dentro de sus posibilidades, de sus talentos y sobre todo con una estrategia adecuada pueda lograr lo que se proponga para este año que recién comienza, el panorama no es claro, lo pudimos ver al momento de hacer nuestros presupuestos en nuestras empresas, la incertidumbre del 2021 se está permeando al 2022, sin embargo hay que entrar con una actitud positiva y propositiva, estando seguros de que daremos nuestro máximo esfuerzo para lograr lo que nos proponemos.

Lo que está claro en muchas empresas es que “ No es válido el esfuerzo sino los resultados”, en el mundo empresarial nos regimos por resultados y solo los vamos a lograr si hacemos un verdadero esfuerzo al momento de prever lo que pudiéramos enfrentar, planear lo que queremos lograr, organizarnos internamente para trabajar como un verdadero equipo, integrándonos para aportar cada quien lo mejor que pueda ofrecer, dirigiendo el negocio por medio de metas y objetivos claros, y al final controlando todo lo que llevamos a cabo