Por Esperanza Ortega Azar
La semana pasada en Querétaro tuve la oportunidad de participar en la Convención Nacional de Delegaciones, Ramas y Sectores de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA), un encuentro relevante para abordar el panorama industrial de México y que contó con la participación de más de 1,200 empresarios provenientes de todos los rincones del país.
La Convención se abrió como un espacio idóneo para el intercambio de ideas, experiencias y oportunidades de negocios entre los líderes y actores clave del sector industrial.
Los participantes se vieron inmersos en debates de vanguardia, explorando una serie de temas de crucial importancia. Desde la inteligencia artificial hasta la ciberseguridad, pasando por el Nearshoring. Y déjeme decirle, los puntos de vista fueron muy aleccionadores y enriquecieron el encuentro aún más porque se sumergieron en discusiones que delinearon el rumbo de la industria.
Además, se analizaron las expectativas generadas a partir de las elecciones que se avecinan en 2024.
Entre los diversos temas abordados destacó por supuesto la importancia de garantizar la seguridad energética en nuestro país. Esta seguridad energética que abarca desde los suministros de combustibles líquidos y gaseosos hasta la electricidad, y que por mucho se erige como un pilar fundamental para el funcionamiento de las empresas y como un imán para atraer inversiones al país.
Si. Hablamos de un contexto en el que la energía se redefine y relocaliza hacia la estabilidad en el suministro energético y se convierte en un elemento indispensable para el crecimiento económico del país. Reconozco el esfuerzo de todos los industriales, y agradezco al gobernador de Querétaro Mauricio Kuri por ello.
En esta Convención se puso el acento a prepararse de cara al 2024, y es que uno de los objetivos se cumplió: compartir ideas, experiencias y propuestas para crecer, haciendo valer las herramientas y capacitación necesarias que nos permiten afrontar de mejor manera los retos que se nos vienen y los que tenemos justo ahora. Abrazamos la idea de aprovechar con todo el nearshoring, esencial porque queremos un futuro próspero para Querétaro, para todo México.
Este en un gran momento para nuestro gran país, busquemos como modernizar la planta productiva nacional, pero requerimos del trabajo en conjunto con las autoridades
Y me quiero referir, estimado lector a otro tema planteado en esta Convención: la reducción de la jornada laboral, porque estoy convencida que es una propuesta que requiere un análisis mucho más profundo, y también un compromiso mutuo entre los trabajadores y el gobierno para mantener la productividad.
Y abundo en esto. Es necesario encontrar un equilibrio que mejore la calidad de vida de los trabajadores sin que esto impacte negativamente en los costos de producción y, en última instancia, en el precio que pagan los consumidores finales. Esto nos lleva a la importancia que reviste el compromiso recíproco entre empresas y trabajadores para elevar la productividad, algunos sectores, las PyMimes podrían estar en riesgo de ajustar su plantilla laboral, por ejemplo.
Nosotros siempre pugnaremos por el bienestar de nuestros colaboradores que tengan una mejor calidad, que tengan mejores beneficios. Eso, es un hecho.