/ martes 29 de octubre de 2024

Chips con sello Made in México

Por, Mtra. Yoanna Shubich Green, Coordinadora Académica de la Facultad de Estudios Globales de la Universidad Anáhuac México

Por, Emiliano Mejorada Madero, estudiante de Relaciones Internacionales, Universidad Anáhuac México

La reciente noticia de que Foxconn seleccionó a Jalisco como sede para instalar la planta de ensamblaje de chips más grande del mundo marca una gran oportunidad para nuestro país. Foxconn, es uno de los mayores ensambladores de tecnología del mundo, y de Jalisco saldrán los chips GB200 de NVIDA, los cuales son fabricados para servidores de Inteligencia Artificial (IA), y cabe resaltar que México cuenta con experiencia en la industria de los semiconductores, pero ¿por qué esto es tan importante para México?

El contexto actual de la industria mundial de semiconductores está marcado por tensiones geopolíticas entre China y Estados Unidos que se han incrementado en los últimos años. En la actualidad, gran parte de la cadena de suministro mundial de chips está localizada en la región de Asía, siendo Taiwán el país que más ha logrado concentrar la producción de chips, no obstante, el riesgo de una intervención militar por parte de China en la isla ha preocupado a Occidente por una posible escasez global de chips.

Los semiconductores son el motor de casi todos los dispositivos electrónicos: computadoras, teléfonos móviles y paneles solares, entre otros, y por ello para Occidente, se ha vuelto imperativo reubicar la cadena de suministros de chips y Estados Unidos, ve esto como un riesgo para su seguridad nacional.

El proyecto de la mano de Foxconn y NVDIA en Jalisco representa una ventaja para fortalecer nuestra posición en la estrategia de semiconductores y en la industria tecnológica, pero a la vez supone un reto, ya que es necesario incentivar el estudio de carreras en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM), al igual que mejorar la infraestructura, garantizar el abastecimiento de energía limpia y agua.

Así, el gobierno mexicano, en colaboración con la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CANIETI) y la Embajada de Estados Unidos, presentó el Plan Maestro para el Desarrollo de la Industria de Semiconductores 2024 – 2030, donde se busca atraer más de 10,000 millones de dólares en inversiones en áreas críticas como el diseño, ensamblaje, pruebas y empaquetado de chips. Además, se incluye el fortalecimiento del talento especializado, el crecimiento de las exportaciones y ser ejemplo en el sector.

México debe posicionarse como un socio confiable para Occidente en la lucha frente al creciente poder tecnológico de China y la posible escasez de chips en caso de un conflicto armado en Taiwán.

Iniciativas como la de Foxconn son inversiones importantes que sirven para posicionar a nuestro país como un actor clave frente a los desafíos que enfrenta la industria global de la escasez de chips y ante la creciente tensión geopolítica entre Estados Unidos y China se debe aprovechar la oportunidad de consolidarnos como un actor clave en la industria de chips.


Por, Mtra. Yoanna Shubich Green, Coordinadora Académica de la Facultad de Estudios Globales de la Universidad Anáhuac México

Por, Emiliano Mejorada Madero, estudiante de Relaciones Internacionales, Universidad Anáhuac México

La reciente noticia de que Foxconn seleccionó a Jalisco como sede para instalar la planta de ensamblaje de chips más grande del mundo marca una gran oportunidad para nuestro país. Foxconn, es uno de los mayores ensambladores de tecnología del mundo, y de Jalisco saldrán los chips GB200 de NVIDA, los cuales son fabricados para servidores de Inteligencia Artificial (IA), y cabe resaltar que México cuenta con experiencia en la industria de los semiconductores, pero ¿por qué esto es tan importante para México?

El contexto actual de la industria mundial de semiconductores está marcado por tensiones geopolíticas entre China y Estados Unidos que se han incrementado en los últimos años. En la actualidad, gran parte de la cadena de suministro mundial de chips está localizada en la región de Asía, siendo Taiwán el país que más ha logrado concentrar la producción de chips, no obstante, el riesgo de una intervención militar por parte de China en la isla ha preocupado a Occidente por una posible escasez global de chips.

Los semiconductores son el motor de casi todos los dispositivos electrónicos: computadoras, teléfonos móviles y paneles solares, entre otros, y por ello para Occidente, se ha vuelto imperativo reubicar la cadena de suministros de chips y Estados Unidos, ve esto como un riesgo para su seguridad nacional.

El proyecto de la mano de Foxconn y NVDIA en Jalisco representa una ventaja para fortalecer nuestra posición en la estrategia de semiconductores y en la industria tecnológica, pero a la vez supone un reto, ya que es necesario incentivar el estudio de carreras en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM), al igual que mejorar la infraestructura, garantizar el abastecimiento de energía limpia y agua.

Así, el gobierno mexicano, en colaboración con la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CANIETI) y la Embajada de Estados Unidos, presentó el Plan Maestro para el Desarrollo de la Industria de Semiconductores 2024 – 2030, donde se busca atraer más de 10,000 millones de dólares en inversiones en áreas críticas como el diseño, ensamblaje, pruebas y empaquetado de chips. Además, se incluye el fortalecimiento del talento especializado, el crecimiento de las exportaciones y ser ejemplo en el sector.

México debe posicionarse como un socio confiable para Occidente en la lucha frente al creciente poder tecnológico de China y la posible escasez de chips en caso de un conflicto armado en Taiwán.

Iniciativas como la de Foxconn son inversiones importantes que sirven para posicionar a nuestro país como un actor clave frente a los desafíos que enfrenta la industria global de la escasez de chips y ante la creciente tensión geopolítica entre Estados Unidos y China se debe aprovechar la oportunidad de consolidarnos como un actor clave en la industria de chips.