/ sábado 15 de octubre de 2022

Cuchillito de palo | El maquiavelito de Bucareli

El otro López, el de Bucareli, está hiperactivo. Le dio cuerda el emperador de palacio para que le echara toda la carne al asador, en cuanto a las Reformas por las que se muere el “egregio mandatario”. Obsesivo, AMLO se niega a que el Poder -Legislativo le detenga sus ocurrencias y caprichos.

Y ahora sí encontró al vasallo ávido de convertirse en corcholata favorita, título al que podrá acceder si le cumple todos sus deseos. Cínico, hasta las cachas, el “maquiavelito” tabasqueño no sale de los salones en los que se definirán el destino de las iniciativas. Le podían hasta poner una cama, en vista de que los ha convertido en su “segundo hogar”. Hora tras hora, “dialoga”, con quienes tienen acceso al voto, “convenciendo”, cuando no presionando y amenazando, a pseudo representantes populares, a los que se tiene apergollados.

Recién se vio en el Senado, cuando, quienes se habían comprometido con la Alianza opositora, a no sufragar a favor de la militarización, cayeron en las redes del ex notario y cambiaron de opinión.

El regreso de la minuta a la Cámara de Diputados fue pan comido, en razón de la mayoría guinda. Quedó firme la estadía de los verdes olivo en las calles, hasta el 2028, empoderamiento del que ya se empiezan a ver las consecuencias.

Se intentó citar a comparecer al jefe de las Fuerzas Armadas, para que aclarara el hackeo de los papagayo papers. La respuesta fue patética y lamentable: Contraviniendo sus obligaciones constitucionales, Cresencio Sandoval les contestó que si querían verlo fueran a su despacho. ¡Dioses del Olimpo, hasta aquí hemos llegado!

Según Monreal y quienes dizque “amarraron” el comportamiento de los soldados en las calles, tendrán que dar cuentas. Habría que preguntarse si así lo entendieron y aceptaron sus mandos mayores, en vista de la respuesta de Sandoval.

Volviendo al Maquiavelito, declaró que ahora van por la Reforma Electoral y a recuperar la Eléctrica. Según él ya se hizo un acuerdo con el PRI, hasta el término del sexenio.

Hay que avisarle a Gayosso, para que recoja los restos del Tricolor, en el caso de que sea cierto el arreglo. El impresentable Alito respondió que eso es falso y lo mismo Rubén Moreira, pero ninguno de los dos es confiable.

Tocar al Instituto Nacional Electoral, de acuerdo a lo expresado por otro sátrapa esquirol, el morenaco Ignacio Mier, mandamás de los diputados guindas, es echar la última palada de tierra sobre la democracia mexicana. Destazar a la institución que nos dio la posibilidad de tener un voto libre, reconocido por las autoridades es desandar el camino que tanto costó.

AMLO quiere un organismo electoral bajo su mando, flexible para aceptar las cochinadas que ha acostumbrado en las urnas y de las que hay sobrados testimonios. Como sabemos por la experiencia, el nunca pierde y cuando sucede es porque le “robaron” la elección. ¿Podemos imaginar el desastre que sería poner en manos de la Secretaría de Gobernación, a quien debe ser autónomo y por completo libre e independiente?

Intentan engañar con el cuento de que es costoso, pero más lo son sus oscuras campañas -como la de la Sheinbaum- en las que se dilapidan millones de pesos, que a saber de dónde salen (El rey del Cash).

Habrá que pelear a brazo partido el que no transite esta aberración, para lo que la sociedad civil tendrá que estar unida y dispuesta a oponerse al regreso de aquella Dictablanda, que creímos pasado.

catalinanq@hotmail.com @catalinanq