/ jueves 7 de noviembre de 2024

DesAforada / ¿Adiós al nearshoring y al T-MEC con el triunfo de Trump?

Al parecer ahora sí se empezará a diluir el tan aclamado nearshoring con el triunfo indiscutible del Donald Trump en Estados Unidos, quien busca fortalecer la producción nacional, el empleo y la competencia frente a China. Unos planes que sin duda podrían afectar a México, que hasta septiembre de este año se mantuvo como su principal socio comercial.

Durante su campaña, el exmandatario propuso reducir los impuestos de 21% a 15% para aquellas empresas que fabriquen sus productos en el país vecino del norte, lo cual es atractivo para cualquier inversionista que busque reducir costos, expandirse o ampliar las cadenas de valor.

Para proteger la producción nacional, Trump pretende elevar los impuestos a las importaciones de 10% a 20%. En el caso de México, el republicano amagó en elevar hasta 200% las importaciones de productos con contenido chino. Estas propuestas hicieron que Elon Musk decidiera cancelar la construcción de la gigafábrica de Tesla en Nuevo León y mejor llevarla a cabo en Texas.

Otra propuesta que hizo el republicano un día antes de las elecciones es imponer un arancel de 25% a las exportaciones mexicanas si la presidenta Claudia Sheinbaum no reducía la delincuencia del crimen organizado.

Frente a este panorama, México se enfrenta a una competencia impositiva, donde si las empresas tienen que escoger entre nuestra nación y EU, la respuesta se ve clara, especialmente porque el gobierno de Sheinbaum no ha hablado de reducir impuestos o dar incentivos a las inversiones, porque evidentemente las finanzas públicas no están para andar reduciendo ingresos.

Analistas ven lejano que Trump realmente aplique los aranceles de 25%, pero lo que sí ven en riesgo es la renegociación del T-MEC, pues ahora aumenta más la probabilidad de que busque una renegociación al 100% o incluso cancelar el acuerdo comercial.

Es imperante que el equipo mexicano, liderado por Luis Rosendo Gutiérrez Romano, ya tenga varias opciones sobre qué negociaciones pueden hacer con Donald Trump que el 20 de enero tomará posesión como presidente de Estados Unidos y que es posible que ese mismo día pueda decidir si revisa o cancela el T-MEC.

Quizá la parte donde más ponga el ojo el republicano es en el sector automotriz, especialmente en la denominación de origen, que durante la primera negociación del TLCAN pidió que fuera 70% contenido de las tres naciones que conforman el acuerdo comercial. No quedó muy satisfecho. Y claramente será una renegociación más álgida.

Lo único medio bueno de este triunfo es que el tipo de cambio no explotó como algunos anticiparon, de hecho CIBanco en varios análisis indicó que ya se estaba descontando un posible éxito del candidato republicano. Y para el cierre de este año proyecta que el tipo de cambio retorne a un rango entre los 19.50 y 19.70 pesos el dólar. Falta esperar qué decide hoy la Reserva Federal en su decisión de política monetaria.


Correo: elizabeth.albarran@elsoldemexico.com.mx

X: @ElizaAlbarran


Al parecer ahora sí se empezará a diluir el tan aclamado nearshoring con el triunfo indiscutible del Donald Trump en Estados Unidos, quien busca fortalecer la producción nacional, el empleo y la competencia frente a China. Unos planes que sin duda podrían afectar a México, que hasta septiembre de este año se mantuvo como su principal socio comercial.

Durante su campaña, el exmandatario propuso reducir los impuestos de 21% a 15% para aquellas empresas que fabriquen sus productos en el país vecino del norte, lo cual es atractivo para cualquier inversionista que busque reducir costos, expandirse o ampliar las cadenas de valor.

Para proteger la producción nacional, Trump pretende elevar los impuestos a las importaciones de 10% a 20%. En el caso de México, el republicano amagó en elevar hasta 200% las importaciones de productos con contenido chino. Estas propuestas hicieron que Elon Musk decidiera cancelar la construcción de la gigafábrica de Tesla en Nuevo León y mejor llevarla a cabo en Texas.

Otra propuesta que hizo el republicano un día antes de las elecciones es imponer un arancel de 25% a las exportaciones mexicanas si la presidenta Claudia Sheinbaum no reducía la delincuencia del crimen organizado.

Frente a este panorama, México se enfrenta a una competencia impositiva, donde si las empresas tienen que escoger entre nuestra nación y EU, la respuesta se ve clara, especialmente porque el gobierno de Sheinbaum no ha hablado de reducir impuestos o dar incentivos a las inversiones, porque evidentemente las finanzas públicas no están para andar reduciendo ingresos.

Analistas ven lejano que Trump realmente aplique los aranceles de 25%, pero lo que sí ven en riesgo es la renegociación del T-MEC, pues ahora aumenta más la probabilidad de que busque una renegociación al 100% o incluso cancelar el acuerdo comercial.

Es imperante que el equipo mexicano, liderado por Luis Rosendo Gutiérrez Romano, ya tenga varias opciones sobre qué negociaciones pueden hacer con Donald Trump que el 20 de enero tomará posesión como presidente de Estados Unidos y que es posible que ese mismo día pueda decidir si revisa o cancela el T-MEC.

Quizá la parte donde más ponga el ojo el republicano es en el sector automotriz, especialmente en la denominación de origen, que durante la primera negociación del TLCAN pidió que fuera 70% contenido de las tres naciones que conforman el acuerdo comercial. No quedó muy satisfecho. Y claramente será una renegociación más álgida.

Lo único medio bueno de este triunfo es que el tipo de cambio no explotó como algunos anticiparon, de hecho CIBanco en varios análisis indicó que ya se estaba descontando un posible éxito del candidato republicano. Y para el cierre de este año proyecta que el tipo de cambio retorne a un rango entre los 19.50 y 19.70 pesos el dólar. Falta esperar qué decide hoy la Reserva Federal en su decisión de política monetaria.


Correo: elizabeth.albarran@elsoldemexico.com.mx

X: @ElizaAlbarran