A inicios del gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se creó el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (Indep), sustituyendo al Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), esto con la idea de que los recursos obtenidos de ventas y/o subastas de mercancías confiscadas por el gobierno se destinen programas sociales prioritarios y también al nuevo Fondo de Pensiones para el Bienestar.
Este diario entrevistó recientemente a Ricardo Rodríguez Vargas, exdirector del Indep, quien dijo que actualmente el organismo gasta más en administrar sus recursos que en dárselos a los programas sociales y que es básicamente un “barril sin fondo”. Esta situación pone cierta incertidumbre a los recursos que se supone debería entregar al Fondo de pensiones, que se creó para completar las jubilaciones de personas que se pensionen bajo el régimen de la Ley del IMSS de 1997 y del ISSSTE de 2007
Según el decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 1 de mayo, el Indep deberá entregar al Fondo los recursos correspondientes a 75% de los remanentes que obtenga, derivados de la enajenación que lleve a cabo de bienes provenientes de entidades transferentes en materia aduanera y fiscal, durante el ejercicio fiscal de 2024 y los ejercicios subsecuentes.
El pasado 1 de julio, en la mañanera, Héctor Santana Suárez, titular de la Unidad de Seguros, Pensiones y Seguridad Social de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), expuso los recursos con los que ya contaba el Fondo de Pensiones para el Bienestar y de qué fuentes provenían. Ese día confirmó que 75% de los ingresos incautados y administrados por Indep pasarían al Fondo al igual que los recursos que se obtuvieron la liquidación de Financiera Nacional de Desarrollo (FND).
Según el funcionario, de los 44,894 mdp que tendría el Fondo para esa semana, alrededor de 12 mil millones de pesos provendrían del Indep, aunque estos datos podremos saberlos a más detalle en las siguientes auditorías o bien en el reporte trimestral que entregue Hacienda y Banxico del Fondo de Pensiones.
Hasta ahora, la realidad es que el Indep vende menos de lo que esperaba. En lo que va de este año, ha obtenido 143.2 millones de pesos, lo que apenas representa 1.9% del valor de todo lo que se tiene incautado en terrenos, casas, automóviles, joyas y otros artículos.
Rodríguez Vargas explicó al reportero Carlos Tovar, que no es tan sencillo vender ciertos bienes, como las casas incautadas de los narcotraficantes, pues si bien se pueden obtener millones de pesos, el precio debe ser menor al mercado, porque no cualquiera quiere adquirir una vivienda que podría ser reclamada después por algún pariente.
No queda claro de dónde surgieron los 12 mil millones de pesos que el Indep transfirió al Fondo de Pensiones para el Bienestar, considerando que en 2020 fue su mejor año con recursos captados por un total de 876.7 millones de pesos.
Esperemos que también en la siguiente entrega de la Cuenta Pública de la Auditoría Superior de la Federación podamos desmenuzar y aclarar bien estas cifras que son esenciales para entender de dónde se están sacando recursos para pagar las pensiones de millones de mexicanos.
