“En México hay casi tantas mujeres como personas en Reino Unido”, dijo la presidenta del Inegi, Graciela Márquez cuando presentó la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID), pues en 2023 México contaba con una población de 129.5 millones de personas, de las cuales 51.7% son mujeres o personas con vulva, que son 66.9 millones.
Es decir, si las condiciones políticas, económicas, sociales y culturales nos lo permitieran, básicamente, el sexo femenino podría hacer de México un país del primer mundo. Pero hay un 49.3% por el que debemos también ocuparnos, lo cual también me hace pensar cuando Christine Lagarde, exdirectora del FMI y actual presidenta del Banco Central Europeo, expresó que si Lehman Brothers hubiera sido Lehman Sisters, el mundo sería muy diferente y quizá, no hablaríamos tanto de crisis.
Para iniciar, la tasa de fertilidad ha reducido, cada vez se tienen menos hijos o hijas. En 2014 se registraban 2.21 hijos por mujer, en 2018 eran 2.07 y en 2023 1.60 hijos. Esta tasa redujo tanto en zonas urbanas como rurales. Esto se puede atribuir, en gran parte, a que las mujeres se cuidan más. A nivel nacional, en promedio 74% de las mujeres en edad fértil (de 15 a 49 años), dijo que usaba un método anticonceptivo, solo 11.5% asegura que nunca ha usado un anticonceptivo.
Cuando se pregunta porqué no lo usan, 19% respondió porque quiere embarazarse y 9.6% dijo que teme los efectos secundarios. La CdMx y Sonora son las entidades donde más se protegen las mujeres en poco más de 78%; mientras que en Michoacán y Chiapas se ubican los menores porcentajes por debajo de 71%.
En la primera relación sexual de las mujeres,en promedio 47% dijo haber usado un método anticonceptivo, lo que representó un aumento frente al promedio de 39.9% en 2028. En las edades de 15 a 19 años, 66.9% de las mujeres dijo haber usado un anticonceptivo, mientras en 2018 fue 59.9%; en en el rango de 20-24 años el porcentaje pasó de 59% a 64.9%, y de 25-29 años de 53% a 59.7%.
La fotografía que nos da la ENADID sobre cómo están delineando las mujeres parte de su vida, nos da cierta claridad de qué deberíamos estar exigiendo a nuestros gobernantes y legisladores y qué políticas públicas se deberían estar trabajando, especialmente en lo laboral, en servicios públicos y financieros.
Durante la conferencia que dio el Inegi para presentar la ENADID, un periodista preguntó por qué no se incluyó a la comunidad LGBTQ+, es decir, por qué sólo se consideraba al sistema binario de Hombre y Mujer, a lo que respondieron: para esta encuesta sería muy complejo, pero en un futuro se irá incluyendo en los aspectos estadísticos.
Y sólo para no dejarlo pasar, en 2018, las personas que tienen 60 años pasó de representar 12.3% de la población a 14.7% en 2023, un tema que debe ocuparnos para plantearnos cómo vamos a tener calidad de vida en los siguientes años, si las autoridades sólo hablan de dar pensiones.
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