Una de las prioridades de la presidenta Claudia Sheinbaum es impulsa, ahora sí, la política industrial del país y promover más las exportaciones de contenido nacional, así como las industrias de consumo nacional.
Vidal Llerenas, subsecretario de industria y comercio de la Secretaría de Economía, cuenta que si bien México se convirtió en el principal proveedor de Estados Unidos, después de China, sólo 20% de las exportaciones que se realizan al país vecino del norte, tuvo desde un inicio algún tipo de componente nacional.
Para potenciar este objetivo, se delineará un plan para fortalecer sectores como la tecnología que permitan desarrollar más contenido nacional, como también un diagnóstico de las importaciones de países asiáticos hacia México que están dañando la producción nacional, como la textil y de calzado.
Sobre el primer planteamiento, Llerenas dice que sin "matar a la gallina de los huevos de oro", el país puede continuar siendo una nación manufacturera y ensambladora, pero hay que potenciar industrias que aporten al contenido nacional para venderlo al extranjero.
De enero a agosto, las exportaciones de mercancías mexicanas crecieron alrededor de 4% con un total de 406,091.1 millones de dólares. De este total, 83% fueron de exportaciones hacia Estados Unidos; mientras 1.58% hacia China.
Sobre la llegada masiva de productos asiáticos y el contrabando de mercancías que están mermando la producción nacional, Llerenas cuenta que se hará una revisión arancelaria y de cómo están operando las aduanas en el país, las cuales desde el sexenio pasado están manejadas por las fuerzas armadas.
Según Llerenas, también se revisará la regulación para ver en qué aspectos se están facilitando la entrada de productos chinos que en el país se venden a precios muy por debajo del costo de producción que enfrentan las industrias nacionales.
Recientemente, la Cámara Nacional de la Industria del Calzado (Canaical), la "importación hormiga" de calzado o minimis en plataformas digitales chinas alcanzó un valor estimado de 4,000 millones de dólares en los últimos doce meses, lo que ha generado un fuerte impacto negativo en la industria nacional.
Empresas como Shein y Temu han inundado el mercado mexicano con productos importados y entran al país sin pagar aranceles debido a que introducen paquetes de menos de 50 dólares.
Con ello, no sólo se afecta a la producción nacional, sino también al fisco que deja de recibir ingresos por impuestos de estas mercancías.
Al cierre de agosto, los impuestos por importación dejaron a las arcas del gobierno 85,899 millones de pesos, un crecimiento de apenas casi 4% anual, de acuerdo con datos de Hacienda.
Sin duda, impulsar la política industrial integral que tanta falta le ha hecho a este país, será clave para el nuevo gobierno que lleva menos de un mes, pero que al parecer está recuperando parte de la estrategia del secretario Rogelio Ramírez de la O para comenzar a delinear por dónde empezar. La expectativa es que con el nearshoring, México no solo sea un país manufacturero, sino también de innovación y desarrollo tecnológico que genere cadenas de valor. Ya veremos.