A poco más de un año de haber entrado en vigor la prohibición de bolsas plásticas en la Ciudad de México, de Claudia Sheinbaum, la falsificación de sellos e impresiones en estos productos para hacerlos pasar como ecológicos cuando no lo son, se ha hecho notar significativamente.
Y es que el legislador Jesús Sesma Suárez, líder del Partido Verde en la capital del país, hace poco denunció que en algunos establecimientos del Centro Histórico se ofrecen a poner un supuesto sello compostable en las bolsas, para simular que son ecológicas cuando no lo son.
Específicamente en la zona de Santo Domingo, algunos locatarios brindan el servicio a los comercializadores de bolsas de plástico, de falsificación de los famosos sellos con las leyendas “100% biodegradable” o “100% reciclable”, las cuales al ser piratas, no cumplen con las estipulaciones emitidas por la Sedema, de Marina Robles.
Dicha dependencia publicó recientemente el Proyecto de Norma Ambiental para la CDMX PROY-NACDMX-010-AMBT-2019, en el que se presentan las especificaciones técnicas que deben cumplir las bolsas y productos plásticos de un solo uso compostables y/o reutilizables.
Esta Norma ambiental fue sometida a consulta pública a principios de enero del presente año, y una vez aprobada, se tiene un plazo de 180 días para iniciar su aplicación en la capital del país.
Ante esta situación, los Industriales de Bolsas Plásticas de México (Inboplast), que preside Álvaro Hernández, ha redoblado esfuerzos para producir bolsas y películas que estén acorde a los requerimientos regulatorios y normativos, según las exigencias de cada entidad, para lo cual el sector destinó millones de pesos en inversión para innovación tecnológica.
Además, cabe destacar que para este 2021, el gremio que representa poco más del 60 por ciento de la producción de estos insumos de uso comercial en el país, espera retomar los niveles de fabricación que tenía en años anteriores.
No olvidemos que derivado de las prohibiciones de bolsas y la crisis sanitaria por el Covid-19, el sector cerró el 2020 con un decremento cercano al 10 por ciento. Y actualmente la industria bolsera tiene un valor aproximado a los 70 mil millones de pesos, sumado a que emplea a poco más de 50 mil personas de forma directa. ¡Usted dirá si la IP no pone de su parte!