/ sábado 17 de febrero de 2024

La Moviola / Nyad, Madame Web, Ted: De verdaderas heroínas y osos

@lamoviola

Ya le conté esta historia. Un enredo más en la enmarañada telaraña en la que se encuentra el cine de superhéroes. Madame Web (S.J Clarkson, 2024) se perfila, al momento de escribir estas líneas, como un fracaso más en el género que no era inmune a la inteligencia del público. Dakota Johnson le pone ganas a su papel, muy alejado del espíritu original del que surge en el cómic, comenzando por la edad, pero no es suficiente para levantar una nula trama.

Las heroínas en el cine merecen una buena película. Créame que tenía toda la intención de abordar el estreno, pero hay muy poco que decir. Nada nuevo, pero nada, en el filme que eso sí, tuvo promoción en México con visita de los protagonistas y toda la cosa. Cine de comida rápida: los mismos ingredientes pero a estas alturas ya nos empachamos.

Lo anterior lleva a una reflexión: sí existen espacios para las heroínas en el cine y ahí surge Nyad (Elizabeth Chai Vasarhelyi). Una de las apuestas de Netflix para la entrega del Oscar. Por principio de cuentas, es el regreso –portentoso- de Annete Bening, como la nadadora estadounidense Diane Nyad que pasados los sesenta años, realizó la hazaña física, humana, espiritual de cruzar las vistas de Cuba hasta Florida con la ayuda de su entrenadora y amiga Bonnie (Jodie Foster, que además de buena actriz ya le agarró la onda al modito mexicano luego de sus visitas ), y del capitán John Bartlett.

La trama se dice fácil, pero el filme dentro de una narrativa en apariencia sencilla resulta sobrecogedor. Los personajes se zambullen en humanidad y una profunda ternura, aborda temas, de forma sutil, apenas pincelados como el valor y la vida en la tercera edad (mientras Madame Web, discrimina la edad del personaje del comic), la libertad en la sexualidad sin politizarla y sobre todo el profundo heroísmo que cada persona guarda.

Bening y Foster tiene sendas nominaciones como actriz, y actriz de reparto. Rhys Ifans está impecable como el capitán del barco que sigue en su travesía-odisea a Nyad y todo marcha como nado sincronizado.

Es muy probable que la película se quede en nominaciones. Esto no le quita valor, sucede cada año; el pequeño dulce de la ceremonia, tranquilo y discreto, pero profundo y conmovedor.

Sin la estridencia mediática, y a pesar de que es un filme hecho para la TV streaming, supera por mucho la mediocridad del Blockbuster. Pues eso, no me iba a quedar con las ganas de escribir de una verdadera heroína.

En corto.

Si no lo ha hecho, ponga atención en Ted, la serie. Seth MacFarlane lo hace otra vez. Aguda, políticamente incorrecta, ahora las aventuras de estos personajes se centran en ls adolescencia de John (Max Burkholder) en 1993.

Buenos gags, nulo miedo a la incorrección, la trama va dirigida a un público que no se asusta de la hipocresía de la cancelación, donde Ted es una especie de santón sin censura. Se puede ver por Universal+ y la verdad en medio de una crisis del humor por la corrección política, es más que refrescante.

Ted, nuestro viejo confiable está de regreso, igual de impertinente ¿y porque no? Afelpado y adorable. Véala, no se va a arrepentir.

@lamoviola

Ya le conté esta historia. Un enredo más en la enmarañada telaraña en la que se encuentra el cine de superhéroes. Madame Web (S.J Clarkson, 2024) se perfila, al momento de escribir estas líneas, como un fracaso más en el género que no era inmune a la inteligencia del público. Dakota Johnson le pone ganas a su papel, muy alejado del espíritu original del que surge en el cómic, comenzando por la edad, pero no es suficiente para levantar una nula trama.

Las heroínas en el cine merecen una buena película. Créame que tenía toda la intención de abordar el estreno, pero hay muy poco que decir. Nada nuevo, pero nada, en el filme que eso sí, tuvo promoción en México con visita de los protagonistas y toda la cosa. Cine de comida rápida: los mismos ingredientes pero a estas alturas ya nos empachamos.

Lo anterior lleva a una reflexión: sí existen espacios para las heroínas en el cine y ahí surge Nyad (Elizabeth Chai Vasarhelyi). Una de las apuestas de Netflix para la entrega del Oscar. Por principio de cuentas, es el regreso –portentoso- de Annete Bening, como la nadadora estadounidense Diane Nyad que pasados los sesenta años, realizó la hazaña física, humana, espiritual de cruzar las vistas de Cuba hasta Florida con la ayuda de su entrenadora y amiga Bonnie (Jodie Foster, que además de buena actriz ya le agarró la onda al modito mexicano luego de sus visitas ), y del capitán John Bartlett.

La trama se dice fácil, pero el filme dentro de una narrativa en apariencia sencilla resulta sobrecogedor. Los personajes se zambullen en humanidad y una profunda ternura, aborda temas, de forma sutil, apenas pincelados como el valor y la vida en la tercera edad (mientras Madame Web, discrimina la edad del personaje del comic), la libertad en la sexualidad sin politizarla y sobre todo el profundo heroísmo que cada persona guarda.

Bening y Foster tiene sendas nominaciones como actriz, y actriz de reparto. Rhys Ifans está impecable como el capitán del barco que sigue en su travesía-odisea a Nyad y todo marcha como nado sincronizado.

Es muy probable que la película se quede en nominaciones. Esto no le quita valor, sucede cada año; el pequeño dulce de la ceremonia, tranquilo y discreto, pero profundo y conmovedor.

Sin la estridencia mediática, y a pesar de que es un filme hecho para la TV streaming, supera por mucho la mediocridad del Blockbuster. Pues eso, no me iba a quedar con las ganas de escribir de una verdadera heroína.

En corto.

Si no lo ha hecho, ponga atención en Ted, la serie. Seth MacFarlane lo hace otra vez. Aguda, políticamente incorrecta, ahora las aventuras de estos personajes se centran en ls adolescencia de John (Max Burkholder) en 1993.

Buenos gags, nulo miedo a la incorrección, la trama va dirigida a un público que no se asusta de la hipocresía de la cancelación, donde Ted es una especie de santón sin censura. Se puede ver por Universal+ y la verdad en medio de una crisis del humor por la corrección política, es más que refrescante.

Ted, nuestro viejo confiable está de regreso, igual de impertinente ¿y porque no? Afelpado y adorable. Véala, no se va a arrepentir.