/ lunes 2 de noviembre de 2020

La prisa por eliminar el Fondo de Salud

No había pasado ni una semana de que Morena concretó la desaparición de 109 fondos y fideicomisos, cuando también promovieron la desaparición del Fondo de Salud por 33 mil millones de pesos. Intentaron imponer su mayoría para lograr una aprobación de forma expedita, pero la oposición sumada logramos detener, al menos por unas horas, la aprobación del recorte.

No es el primer recorte al fondo de salud, en 2019 se le quitaron 40 mil millones de pesos de manera irreversible, justo antes del inicio de la pandemia, ahora le quitaron lo que restaba. Por eso hemos sido testigos todo el año de la batalla que están encabezando los padres de los niños con cáncer para que se atienda a sus hijas e hijos. Esto se suma a la desaparición del Seguro Popular que dejó sin atención a millones de mexicanos y que se tradujo en que muchos tuvieron que pagar para atenderse y muchos otros fallecieron sin haber recibido el tratamiento por la falta del financiamiento. Lo peor del asunto es que sí había recursos, pero no se ejercieron.

Lo anterior se dio entre finales del año pasado e inicios del presente, poco antes de que iniciara la pandemia del COVID-19 que evidenció éstas y muchas otras deficiencias del sistema de salud. Ahora a los problemas de abastecimiento de medicamentos, de cobertura, de atención y hasta de sentido común para enfrentar la crisis sanitaria, se sumará la desaparición del Fondo de Salud para el Bienestar.

No está de más recordar que este año se ejercieron 73% menos recursos en gastos catastróficos que el último año del sexenio pasado y para el año que entra simplemente no habrá recursos ni partida. Esto se ha traducido y se traducirá en que no se atendieron los cuidados intensivos neonatales, el cáncer de mamá, el cáncer cervicouterino, el cáncer de colón, el cáncer de próstata, la leucemia, el linfoma, las enfermedades infecto-contagiosas, los trastornos quirúrgicos congénitos, la hepatitis y los infartos, entre otros.

El debate sobre la desaparición del fondo se realizó previamente en Parlamento Abierto y diversas asociaciones de la sociedad civil como la “Asociación Mexicana de Lucha Contra el Cáncer” y “Juntos contra el Cáncer”, entre muchas otras, reprobaron la extinción del fondo.

La medida es inhumana y es equivocada porque suma en opacidad y resta en capacidad; porque centraliza y porque elimina la esperanza en quienes más la necesitan. La prisa por eliminar el fondo y la falta de argumentos para justificarlo son prueba de que los legisladores de Morena sabían lo que estaban haciendo y aun así lo concretaron.

Coordinador del Grupo Parlamentario del PAN

@JCRomeroHicks

No había pasado ni una semana de que Morena concretó la desaparición de 109 fondos y fideicomisos, cuando también promovieron la desaparición del Fondo de Salud por 33 mil millones de pesos. Intentaron imponer su mayoría para lograr una aprobación de forma expedita, pero la oposición sumada logramos detener, al menos por unas horas, la aprobación del recorte.

No es el primer recorte al fondo de salud, en 2019 se le quitaron 40 mil millones de pesos de manera irreversible, justo antes del inicio de la pandemia, ahora le quitaron lo que restaba. Por eso hemos sido testigos todo el año de la batalla que están encabezando los padres de los niños con cáncer para que se atienda a sus hijas e hijos. Esto se suma a la desaparición del Seguro Popular que dejó sin atención a millones de mexicanos y que se tradujo en que muchos tuvieron que pagar para atenderse y muchos otros fallecieron sin haber recibido el tratamiento por la falta del financiamiento. Lo peor del asunto es que sí había recursos, pero no se ejercieron.

Lo anterior se dio entre finales del año pasado e inicios del presente, poco antes de que iniciara la pandemia del COVID-19 que evidenció éstas y muchas otras deficiencias del sistema de salud. Ahora a los problemas de abastecimiento de medicamentos, de cobertura, de atención y hasta de sentido común para enfrentar la crisis sanitaria, se sumará la desaparición del Fondo de Salud para el Bienestar.

No está de más recordar que este año se ejercieron 73% menos recursos en gastos catastróficos que el último año del sexenio pasado y para el año que entra simplemente no habrá recursos ni partida. Esto se ha traducido y se traducirá en que no se atendieron los cuidados intensivos neonatales, el cáncer de mamá, el cáncer cervicouterino, el cáncer de colón, el cáncer de próstata, la leucemia, el linfoma, las enfermedades infecto-contagiosas, los trastornos quirúrgicos congénitos, la hepatitis y los infartos, entre otros.

El debate sobre la desaparición del fondo se realizó previamente en Parlamento Abierto y diversas asociaciones de la sociedad civil como la “Asociación Mexicana de Lucha Contra el Cáncer” y “Juntos contra el Cáncer”, entre muchas otras, reprobaron la extinción del fondo.

La medida es inhumana y es equivocada porque suma en opacidad y resta en capacidad; porque centraliza y porque elimina la esperanza en quienes más la necesitan. La prisa por eliminar el fondo y la falta de argumentos para justificarlo son prueba de que los legisladores de Morena sabían lo que estaban haciendo y aun así lo concretaron.

Coordinador del Grupo Parlamentario del PAN

@JCRomeroHicks