/ sábado 9 de noviembre de 2024

Notimex: imagen de Mexico en el mundo (III)

Desde su fundación, Notimex ha tenido directores generales que han sido puntales de la comunicación nacional. Recuerdo a Enrique Herrera, Horacio Estavillo, Pedro Ferriz Santacruz, Carlos Ferreira, Miguel López Azuara, Héctor Ezeta, Raymundo Rivapalacio, Pablo Hiriart, Rubén Alvarez, y el último y muy malo Alejandro Ramos. Me disculpo por quienes no recuerdo, que son los posteriores. Épocas y estilos diferentes. No obstante ha prevalecido en ellos su capacidad y entrega sin límites al servicio de la información nacional.

Habría que consignar, porque fue como un punto de partida, el primer evento que cubrió Notimex: la celebración, en 1968, de los Juegos de la XIX Olimpiada. Fue, en esos momentos, el suceso más importante en el mundo y la prueba de fuego, el rito de iniciación periodística que pasó con éxito el magro equipo informativo de la agencia. Para Notimex fue también un reto informar sobre las repercusiones que la Revolución de Mayo y la Primavera de Praga tuvieron sobre el movimiento estudiantil en México. Fue tarea difícil para todos los medios informativos. A Notimex, que nacía, le tocó abrir los ojos en una época dolorosa para la sociedad mexicana.

En noviembre de 68, y en colaboración con el nuevo canal 8 (que estaba a punto de iniciar sus transmisiones), Notimex cubrió los pormenores de la última Reseña Cinematográfica de Acapulco. De los miles y miles de reporteros que salieron de la ciudad de México tengo la honra de haber sido el primer reportero que salió de la ciudad de México, evento al que fui destacado como reportero, y de igual me honra de haber sido el primer corresponsal que salió del país rumbo a República Dominicana a una conferencia citada por el presidente Joaquín Balaguer de República Dominicana, conferencia a la que acudí gustoso acompañado del estupendo camarógrafo Arturo Rodríguez.

En Acapulco conocí a distinguidos compañeros de la fuente de espectáculos de los demás medios, de quienes recuerdo a Alfredo Ruíz del Río, Raúl Velasco (quien allí nació a la televisión), Ricardo Perete, Leopoldo Meraz, Leopoldo Porras, Rita Gánem, Carlos Viseras, Jesús Gallegos, Angel Alcántara (El Duende Filmo), Fernando Morales Ortiz, Enrique Rosado, Ricardo Vázquez Villalobos, Bertha Alicia Flores, Juan Manuel Tort, y muchos más. El doctor Francisco Marín G., quien sería a futuro director general de Cinematografía, fungía entonces como subdirector encargado de prensa.

En enero de 1969 salió al aire un nuevo canal de televisión, el canal 8, con nueva gente, nuevo estilo y fuertes inyecciones de dinero provenientes del grupo Monterrey. Sus instalaciones en los viejos Estudios San Angel Inn, eran futurísticas. (Hoy se llaman Televisa San Ángel). Hasta entonces los estudios de Telesistema Mexicano en Avenida Chapultepec, y del canal 11 en Santo Tomás, eran los más conocidos, pero funcionales aunque modestos. La modernidad y el dinamismo del naciente canal 8 propició un fuerte interés en Notimex para iniciarse en la televisión.

Así, en enero de 1969, al arrancar la nueva programación se incluyó el noticiario denominado Teleperiódico Notimex-El Día. Los recursos materiales de esos años hacían más interesante el reto. Los periódicos El Nacional y El Día nos proveían la información. Nuestro equipo de camarógrafos de cine (recuérdese que no existía el video tape portátil) y los servicios fílmicos de agencias extranjeras, nos daban la imagen. La producción y dirección del noticiario la hicieron, en su momento, jóvenes impetuosos que hoy ya han traspasado el umbral de la fama y han sido muy conocidos en el mundo de la televisión: Salvador Ortiz, Gustavo Zozaya, Alberto del Bosque, Américo Solé, Guillermo Núñez. El Teleperiódico era hablado por dos excelentes locutores: Jorge Kellog y Arturo Ibáñez. Posteriormente se incorporaron Lolita Ayala, Talina Fernández, Guillermo Ochoa y otros. Debo mencionar que Lolita Ayala se apersonó un día en las oficinas de Notimex representando a la empresa Olivetti de máquinas de escribir; ver su rostro e imaginarla en pantalla se hizo realidad en un dos por tres. Lolita, Ochoa, y tiempo después y el inútil de Ferriz de Con vieron en Notimex las primeras luces de la comunicación.

Pues bien, en aquel noticiario de televisión se incluyó una sección, novedosa y precursora, de comentarios sobre la vida nacional. Cada día un comentarista; Oscar Flores Tapia (quien luego fue gobernador de Coahuila), Raúl Carrancá y Rivas, Carlos Tornero Díaz, Miguel Bueno y Malo (director del INBA), Raymundo Ramos. Nuestro comentarista de deportes era Eduardo Andrade, comunicador y político. Era un grupo heterogéneo de especialistas, pero homogéneo en sus deseos de superación y participación en un naciente y valioso proyecto: el sistema de comunicación del Gobierno Mexicano.

Desde su fundación, Notimex ha tenido directores generales que han sido puntales de la comunicación nacional. Recuerdo a Enrique Herrera, Horacio Estavillo, Pedro Ferriz Santacruz, Carlos Ferreira, Miguel López Azuara, Héctor Ezeta, Raymundo Rivapalacio, Pablo Hiriart, Rubén Alvarez, y el último y muy malo Alejandro Ramos. Me disculpo por quienes no recuerdo, que son los posteriores. Épocas y estilos diferentes. No obstante ha prevalecido en ellos su capacidad y entrega sin límites al servicio de la información nacional.

Habría que consignar, porque fue como un punto de partida, el primer evento que cubrió Notimex: la celebración, en 1968, de los Juegos de la XIX Olimpiada. Fue, en esos momentos, el suceso más importante en el mundo y la prueba de fuego, el rito de iniciación periodística que pasó con éxito el magro equipo informativo de la agencia. Para Notimex fue también un reto informar sobre las repercusiones que la Revolución de Mayo y la Primavera de Praga tuvieron sobre el movimiento estudiantil en México. Fue tarea difícil para todos los medios informativos. A Notimex, que nacía, le tocó abrir los ojos en una época dolorosa para la sociedad mexicana.

En noviembre de 68, y en colaboración con el nuevo canal 8 (que estaba a punto de iniciar sus transmisiones), Notimex cubrió los pormenores de la última Reseña Cinematográfica de Acapulco. De los miles y miles de reporteros que salieron de la ciudad de México tengo la honra de haber sido el primer reportero que salió de la ciudad de México, evento al que fui destacado como reportero, y de igual me honra de haber sido el primer corresponsal que salió del país rumbo a República Dominicana a una conferencia citada por el presidente Joaquín Balaguer de República Dominicana, conferencia a la que acudí gustoso acompañado del estupendo camarógrafo Arturo Rodríguez.

En Acapulco conocí a distinguidos compañeros de la fuente de espectáculos de los demás medios, de quienes recuerdo a Alfredo Ruíz del Río, Raúl Velasco (quien allí nació a la televisión), Ricardo Perete, Leopoldo Meraz, Leopoldo Porras, Rita Gánem, Carlos Viseras, Jesús Gallegos, Angel Alcántara (El Duende Filmo), Fernando Morales Ortiz, Enrique Rosado, Ricardo Vázquez Villalobos, Bertha Alicia Flores, Juan Manuel Tort, y muchos más. El doctor Francisco Marín G., quien sería a futuro director general de Cinematografía, fungía entonces como subdirector encargado de prensa.

En enero de 1969 salió al aire un nuevo canal de televisión, el canal 8, con nueva gente, nuevo estilo y fuertes inyecciones de dinero provenientes del grupo Monterrey. Sus instalaciones en los viejos Estudios San Angel Inn, eran futurísticas. (Hoy se llaman Televisa San Ángel). Hasta entonces los estudios de Telesistema Mexicano en Avenida Chapultepec, y del canal 11 en Santo Tomás, eran los más conocidos, pero funcionales aunque modestos. La modernidad y el dinamismo del naciente canal 8 propició un fuerte interés en Notimex para iniciarse en la televisión.

Así, en enero de 1969, al arrancar la nueva programación se incluyó el noticiario denominado Teleperiódico Notimex-El Día. Los recursos materiales de esos años hacían más interesante el reto. Los periódicos El Nacional y El Día nos proveían la información. Nuestro equipo de camarógrafos de cine (recuérdese que no existía el video tape portátil) y los servicios fílmicos de agencias extranjeras, nos daban la imagen. La producción y dirección del noticiario la hicieron, en su momento, jóvenes impetuosos que hoy ya han traspasado el umbral de la fama y han sido muy conocidos en el mundo de la televisión: Salvador Ortiz, Gustavo Zozaya, Alberto del Bosque, Américo Solé, Guillermo Núñez. El Teleperiódico era hablado por dos excelentes locutores: Jorge Kellog y Arturo Ibáñez. Posteriormente se incorporaron Lolita Ayala, Talina Fernández, Guillermo Ochoa y otros. Debo mencionar que Lolita Ayala se apersonó un día en las oficinas de Notimex representando a la empresa Olivetti de máquinas de escribir; ver su rostro e imaginarla en pantalla se hizo realidad en un dos por tres. Lolita, Ochoa, y tiempo después y el inútil de Ferriz de Con vieron en Notimex las primeras luces de la comunicación.

Pues bien, en aquel noticiario de televisión se incluyó una sección, novedosa y precursora, de comentarios sobre la vida nacional. Cada día un comentarista; Oscar Flores Tapia (quien luego fue gobernador de Coahuila), Raúl Carrancá y Rivas, Carlos Tornero Díaz, Miguel Bueno y Malo (director del INBA), Raymundo Ramos. Nuestro comentarista de deportes era Eduardo Andrade, comunicador y político. Era un grupo heterogéneo de especialistas, pero homogéneo en sus deseos de superación y participación en un naciente y valioso proyecto: el sistema de comunicación del Gobierno Mexicano.