/ lunes 26 de agosto de 2024

Poder Nacional / México en las elecciones presidenciales Estados Unidos

No hay duda, de que México, como tema electoral en el país del norte es una aspecto central. Es de esperar que en los ámbitos de análisis e inteligencia civil, registren lo que sucede.

De manera formal, aunque ya era más que sabido, Kamala Harris, fue electa candidata a la Casa Blanca, junto con el prestigiado gobernador de Minnesota, Thomas Waltz, para la Vicepresidencia. Con el unánime respaldo de los principales líderes y dos ex presidentes, William Clinton y Barack Obama –junto con sus esposas, el hoy Partido en el poder, se apresta para enfrentar a un poderoso candidato del Partido Republicano, Donald Trump, que ha iniciado su insólita tercera campaña consecutiva.

Y señalo insólita campaña, pues como sabemos, por mandato constitucional en ese país, un Presidente solamente puede ocupar por dos ocasiones dicho cargo y nunca más. Sin embargo, en el caso de Trump, al ser derrotado en las elecciones de 2019 por Jospeh Biden, cuando aquél buscaba la reelección, ahora tiene todo el derecho de volver a competir. Así que, 2015, 2019 y 2014, quedarán en el anecdotario de la vida política estadounidense, pues desde Franklin D. Roosevelt –que fue último Presidente en ser electo por cuatro ocasiones consecutivas, pues ahora el aspirante por los republicanos, cuenta con posibilidades para regresar a la Casa Blanca. Veremos.

Por lo que hace a los intereses de México, fundamentales para su desarrollo económico y comercial, el radicalismo de Trump parece incontenible. En sus posturas aislacionistas y proteccionistas, que van acompañadas de marcados pronunciamientos racistas, xenófobos y de otras intolerancias (ideológicas, homofóbicas) se refrendaron durante la semana pasada al pronunciarse abiertamente que dado el caso y de continuar, lo que para él son abusos de parte de México en cuanto al intercambio comercial, acabaría con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Canadá, Estados Unidos México).

Por su parte, Kamala Harris, debido a que tiene unos cuantos días en la formal posición de candidata presidencial, aún no ha hecho pronunciamientos específicos respecto de la compleja y complicada relación con México, que como sabemos, tiene una amplia variedad de temas: migración, tráfico de drogas, violencia criminal fronteriza, tráfico de armas, comercio, medio ambiente, entre los principales. Usualmente, el Partido Demócrata, mantiene posturas liberales y un poco (aunque no mucho) más dispuestas al diálogo y negociación hacia nuestro país. Sin embargo, como lo he apuntado, la posibilidad de que dos mujeres por primera vez en sus respectivos países ocupen la titularidad del Poder Ejecutivo, es sin duda, la posibilidad del inicio de una nueva etapa de entendimiento y acercamiento de posiciones en donde ambos gobiernos y sus sociedades, pueden obtener beneficios. Más aún, para el caso del país fronterizo del norte, pues luego de las simbólicas elecciones de Barack Obama, hoy de nueva cuenta una hija de migrantes de primera generación, esta en reales condiciones de asumir la dirección de la potencia preponderante a nivel mundial. Un paso muy importante, en el caso de realizarse, para las democracias liberales en el mundo. Sin duda.

Por eso para los intereses nacionales de México, es muy importante el proceso electoral de ese país, así como sus resultados. En los hechos, de ganar la aspirante demócrata, se pondrá, sin discusión, el ejemplo de la pluralidad, la integración social y sobre todo, el talante cívico de ese electorado. Falta poco, quizá algunos días, para que se comiencen a decantar las posturas de las y los demás aspirantes al Senado y la Cámara de Representantes rumbo a los comicios del 5 de noviembre. Ya analizaremos los pronunciamientos al respecto, de los aspirantes estadounidense en las próximas entregas. México es tema.

javierolivaposda@gmail.com

@JOPso

No hay duda, de que México, como tema electoral en el país del norte es una aspecto central. Es de esperar que en los ámbitos de análisis e inteligencia civil, registren lo que sucede.

De manera formal, aunque ya era más que sabido, Kamala Harris, fue electa candidata a la Casa Blanca, junto con el prestigiado gobernador de Minnesota, Thomas Waltz, para la Vicepresidencia. Con el unánime respaldo de los principales líderes y dos ex presidentes, William Clinton y Barack Obama –junto con sus esposas, el hoy Partido en el poder, se apresta para enfrentar a un poderoso candidato del Partido Republicano, Donald Trump, que ha iniciado su insólita tercera campaña consecutiva.

Y señalo insólita campaña, pues como sabemos, por mandato constitucional en ese país, un Presidente solamente puede ocupar por dos ocasiones dicho cargo y nunca más. Sin embargo, en el caso de Trump, al ser derrotado en las elecciones de 2019 por Jospeh Biden, cuando aquél buscaba la reelección, ahora tiene todo el derecho de volver a competir. Así que, 2015, 2019 y 2014, quedarán en el anecdotario de la vida política estadounidense, pues desde Franklin D. Roosevelt –que fue último Presidente en ser electo por cuatro ocasiones consecutivas, pues ahora el aspirante por los republicanos, cuenta con posibilidades para regresar a la Casa Blanca. Veremos.

Por lo que hace a los intereses de México, fundamentales para su desarrollo económico y comercial, el radicalismo de Trump parece incontenible. En sus posturas aislacionistas y proteccionistas, que van acompañadas de marcados pronunciamientos racistas, xenófobos y de otras intolerancias (ideológicas, homofóbicas) se refrendaron durante la semana pasada al pronunciarse abiertamente que dado el caso y de continuar, lo que para él son abusos de parte de México en cuanto al intercambio comercial, acabaría con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Canadá, Estados Unidos México).

Por su parte, Kamala Harris, debido a que tiene unos cuantos días en la formal posición de candidata presidencial, aún no ha hecho pronunciamientos específicos respecto de la compleja y complicada relación con México, que como sabemos, tiene una amplia variedad de temas: migración, tráfico de drogas, violencia criminal fronteriza, tráfico de armas, comercio, medio ambiente, entre los principales. Usualmente, el Partido Demócrata, mantiene posturas liberales y un poco (aunque no mucho) más dispuestas al diálogo y negociación hacia nuestro país. Sin embargo, como lo he apuntado, la posibilidad de que dos mujeres por primera vez en sus respectivos países ocupen la titularidad del Poder Ejecutivo, es sin duda, la posibilidad del inicio de una nueva etapa de entendimiento y acercamiento de posiciones en donde ambos gobiernos y sus sociedades, pueden obtener beneficios. Más aún, para el caso del país fronterizo del norte, pues luego de las simbólicas elecciones de Barack Obama, hoy de nueva cuenta una hija de migrantes de primera generación, esta en reales condiciones de asumir la dirección de la potencia preponderante a nivel mundial. Un paso muy importante, en el caso de realizarse, para las democracias liberales en el mundo. Sin duda.

Por eso para los intereses nacionales de México, es muy importante el proceso electoral de ese país, así como sus resultados. En los hechos, de ganar la aspirante demócrata, se pondrá, sin discusión, el ejemplo de la pluralidad, la integración social y sobre todo, el talante cívico de ese electorado. Falta poco, quizá algunos días, para que se comiencen a decantar las posturas de las y los demás aspirantes al Senado y la Cámara de Representantes rumbo a los comicios del 5 de noviembre. Ya analizaremos los pronunciamientos al respecto, de los aspirantes estadounidense en las próximas entregas. México es tema.

javierolivaposda@gmail.com

@JOPso