Eses dilatado arco cronológico (109 años), por si hiciera falta recordarlo, nos remite a la constante presencia de las Fuerzas Armadas en el desarrollo y sentido de la Nación y de la democracia. El Puerto de Veracruz, a lo largo de la historia de lo que hoy es México, ha tenido una constante presencia en episodios decisivos que van desde el primer desembarco de lo que sería la gesta de la Conquista, hasta la actual modernización de las instalaciones portuarias, para convertirlo en origen y destino del comercio nacional y sobre todo internacional.
Recordar la gesta y resistencia heroica ante la invasión de las tropas de los Estados Unidos, en una más de sus intentonas por condicionar y decidir el proceso de la Revolución Mexicana –faltaría el monumental fracaso de la Expedición Punitiva en Chihuahua, implica reconocer las profundas vicisitudes para contar con el país que hoy tenemos. Esos antecedentes, aportan las consistentes bases para proyectar, tanto los intereses como el Poder Nacional de México, en un ambiente de cerradas competencias, a la vez, que promotor de espacios y acuerdos para el fomento de la cooperación.
En el contexto de una intensa actividad marítima y naval mundial, la Armada de México, se adapta y refuerza al mismo tiempo, los principios y valores que le caracterizan como una de los baluartes de la Independencia. Libertad, Soberanía, Independencia, Democracia e Integridad geográfica de la Nación. De allí, que la remembranza del heroico 21 de abril de 1914, sea determinante en la construcción de nuestra identidad. Debemos tenerlo presente.
Por otra parte, como cada dos años, desde 2013, se llevó a cabo la Feria Aeroespacial de México, Famex 2023, organizada por la Secretaría de la Defensa Nacional, a través de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM). Teniendo como sede, la Base Aérea Militar no. 1 de “Santa Lucía”, se realizó del 26 al 29 de abril, contando con 750 expositores, de los cuales 350 fueron empresas y 160 Universidades, centros de estudio e institutos. En ese rubro, por México, destacó la Universidad de la Aeronáutica en Querétaro (www.unaq.edu.mx), que a su vez, forma parte de un extenso complejo educativo e industrial, referente a nivel internacional.
El protagonismo alcanzado por la industria aeronáutica, aeroespacial y satelital, exige a los países y sus sistemas tecnológicos, colocarse en la punta del desarrollo, tal como es el caso de México. Con datos proporcionados por los organizadores de la Famex, hubo representación de 50 países. En medio de ese intenso ambiente de intercambios, es que cobró sentido y precisión, lo que se conoce como la “triple hélice” en la proyección de la dicha industria en nuestro país: 1. El Consejo Mexicano de Educación Aeroespacial; 2. Federación Mexicana de la Industria Aeroespacial; y 3. La participación decidida del Gobierno de la República y de la Fuerza Aérea Mexicana.
La convergencia de educación/investigación, con la industria nacional e internacional, así como la contribución del compromiso del gobierno de la República y la FAM, es un referente de la sumatoria organizada de esfuerzos, el amplio espectro. Nos vemos en la Famex 2025.
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