Nacida en 2023 durante su primer encuentro nacional en Querétaro, Constituyentes es una red de más de 100 activistas de todo el país. Después de un año de trabajo coordinado por la asociación civil, apartidista y sin fines de lucro, Práctica Laboratorio para la Democracia se volvieron a reunir en la Ciudad de México en un espacio de lucha que comparte los valores del colectivo: el Huerto Roma Verde.

Feministas, ambientalistas, defensoras del territorio, personas indígenas, afromexicanas, con discapacidad, de las poblaciones de la diversidad sexual y de género, liderazgos gremiales, activistas del comercio popular, política de drogas, del derecho a la vivienda, al trabajo o de la salud, entre varias otras causas, comparten los efectos de la desigualdad y la reivindicación para un país más igualitario e incluyente.

Recibieron herramientas para el cuidado, para fortalecer sus acciones de visibilidad, de construcción de consenso y de incidencia. En las plenarias y grupos de trabajo resaltaron un contexto común de violencia en los territorios, en especial para las personas defensoras de derechos humanos y de la vida, así como la gravedad de los efectos de las crisis climática o de Estado de Derecho.

Vislumbraron el cambio de autoridades y representantes como una oportunidad para participar y mover la brújula rumbo a un desarrollo que no deje a nadie atrás y mejore las condiciones de vida para todas, todos y todes. Pudieron conversar con personas tomadoras de decisión en funciones del poder ejecutivo, legislativo y de la sociedad civil con el objetivo de tender puentes de colaboración como con el diputado Alfonso Ramírez Cuellar, vice coordinador de MORENA en la Cámara de Diputados, la senadora Amalia García, presidenta de la Comisión de la Agenda 2030 del Senado de la República, Lisa Sánchez Directora de México Unido contra la Delincuencia y Nelly Juárez, Secretaria de Pueblos y Barrios Originarios y Comunidades Indígenas Residentes del Gobierno de la Ciudad de México.

Con fuerza y convicciones, refrendaron su alianza comunitaria y propositiva para “cambiar las reglas del juego” y “darle la vuelta” a un sistema democrático aún en deuda con la igualdad real. En conjunto, seguirán intercambiando, resistiendo e incidiendo gracias a la elaboración y aprobación colectiva de 57 propuestas objetivo que impulsarán entre 2025 y 2030.

El encuentro terminó con un intercambio muy enriquecedor con decenas de personas de distintas generaciones del Programa de Liderazgo Progresista de la Fundación Friedrich Ebert que se lleva a cabo desde hace más de 15 años. Acordaron detonar un análisis sobre la situación de la agenda progresista en México también a la luz del nuevo Gobierno de México encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum desde un enfoque constructivo y democrático de izquierda social.

La sociedad civil es un poder que tiene poder. Pero no es una cosa homogénea. No es monopolio de nadie, ni tampoco la usurpación de causas por unos cuantos para jugar a la “oposición”. Repensar y articular los activismos progresistas desde la sociedad civil es una oportunidad para seguir visibilizando los desafíos e impulsar en colectivo las soluciones para un México vivo más deliberativo, justo y democrático.