México es uno de los países con más desigualdad de todo el mundo. En el país, 10% de la población —los más ricos— acumula 78.7% de la riqueza; además, los ingresos de este grupo son hasta 30 veces más altos que los del 50% más pobre de la población, según el Reporte Mundial de Desigualdad 2022. Los grandes empresarios de nuestra gran nación agrupados en el consejo mexicano de negocios y, otros que no están en ese club, no se han dado cuenta que. con gran eficiencia el actual gobierno ha despertado la Guerra entre pobres y ricos- Recordemos cuando los moneros dibujaban con bombín y puro en frac a los explotadores empresarios y, ahora más, con el tema de la reforma judicial y la sobre representación.
Habiendo analizado la reforma judicial, vemos que ésta llegó con cambios inconsistentes al sistema jurisprudencial al restablecer el modelo de precedentes, insertándolo en un sistema aún mucho más complejo que el vigente en la época en la que fue necesaria su desaparición y sin haberse resuelto los problemas esenciales que propiciaron su abandono. Pudimos apreciar que, pese a su trascendencia, el cambio propuesto en materia de jurisprudencia es uno de los aspectos de la reforma menos considerados en la discusión oficial, falta de atención que se vio reflejada en el texto de los decretos difundidos, donde los cambios propuestos en dicho rubro pasaron en los mismos términos de las iniciativas presidenciales, tanto en el ámbito constitucional como en el de la legislación secundaria.
Después de años de trabajo directo de los pequeños y medianos empresarios con trabajadores, sus familias y la ciudadanía en general, en especial con los que menos tiene, para que entendieran el esfuerzo y la aportación de la empresa brinda a la sociedad, con las "reformas" propuesta por el ejecutivo federal, los están perdiendo por falta de estrategia y visión, para detectar el fondo y la realidad de las cosas. Mientras la gente; incluyendo a los mas pobres, piensa que la reforma judicial solo afecta a los mas ricos y caen en la trampa narrativa del gobierno cuatrotrero, el encono nacional crece e incluso amenaza a los "corruptos explotadores empresarios, dicen que, "los ricos se chinguen".
Esa falsa narrativa oficialista tiene hoy a nuestro país en la debacle económica, el primero de diciembre cumpliremos seis años de incertidumbre provocada con enormes sacudidas internas, por la megalomanía y el desconocimiento de la función publica. Al llegar al poder, López Obrador prometió tasas de crecimiento del 4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) con el discurso “primero los pobres”, pero al final de su sexenio ahora su reto es que la economía y la pobreza vuelvan a los niveles previos a su gestión. Aún así, hay gente que piensa que México estaría mejor sin empresarios, que con las empresas del gobierno obtendrán empleos,, nada mas falso. Por eso el presidente ha pedido a los 5 más ricos que se pronuncien y hasta el momento solo 1 cayó en la trampa.
