/ martes 6 de agosto de 2024

Rentar en CDMX, soñar con vivienda… y no tenerla

El martes pasado, el Jefe de Gobierno Martí Batres envió al Congreso una iniciativa en materia de vivienda.

La propuesta tiene 3 objetivos: frenar el incremento en el costo de las rentas, crear un registro digital de contratos de arrendamiento, y la obligación del Gobierno de la CDMX para la producción pública de vivienda para arrendamiento.

Aunque por años las autoridades han señalado el déficit de vivienda y las acciones para abatirlo, nuestra realidad, es todavía más compleja que décadas atrás.

Muchas personas aún anhelan tener vivienda propia, pero ante la oferta de vivienda insuficiente, los costos elevados y sin poder acceder a un crédito, adquirirla es más que un sueño.

Sin embargo, ¿No es objetivo del INVI atender a quienes no tienen manera de acceder a un crédito tradicional para adquirir vivienda?

A pesar de su fracaso, el INVI. será responsable de producir la vivienda para arrendamiento La pregunta es si podrá con 3 tareas, o cuál será su prioridad:

Construir vivienda social y popular para que la puedan adquirir las personas; terminar las viviendas de reconstrucción, o producir vivienda para que el gobierno participe en el mercado inmobiliario y la oferte en renta.

Recordemos que en la Ciudad de México, toda persona tiene derecho a una vivienda digna y adecuada. En consecuencia, la Ley de Vivienda precisa que el derecho consiste en tener para sí o su familia, una vivienda con mejora continua de sus condiciones.

La iniciativa deja claro que habrá vivienda para renta, se construirá con recursos públicos y solo para personas de bajos ingresos, atendiendo a la población que ya encuentra respuesta en la oferta existente, limitándola a la que ofrece el Estado.

Habrá quienes sostengan que la propuesta es innovadora, sin embargo, a la luz de la Ley de Vivienda no es así. Ya existe esa posibilidad; es más, incluso con una población objetivo más amplia: los grupos de atención prioritaria. ¡Vaya regresión!

En vez de progresividad en el derecho a la vivienda, se antepone el discurso del líder morenista “primero los pobres”, y elimina la posibilidad de vivienda en renta a mujeres, jóvenes, víctimas, de identidad indígena, afrodescendientes, entre otros.

Quedaron olvidadas las propuestas de campaña que, hace 6 años, hizo Claudia Sheinbaum como candidata al gobierno de la CDMX: mejorar las condiciones de viviendas existentes y garantizar oferta de vivienda nueva para las y los capitalinos, y eso incluía contar con vivienda social o popular.

Debe cuestionarse al gobierno la falta de participación del Instituto de Planeación, pues los Planes y Programas que le corresponde elaborar podrían plantear resultados a mediano y largo plazo.

En cambio, para evitar incrementos en las rentas, se plantea restringir que entre los particulares puedan rentar una vivienda, ya que a fin de ser autorizado de inmediato, se debe inscribir en un registro digital.

El martes pasado, el Jefe de Gobierno Martí Batres envió al Congreso una iniciativa en materia de vivienda.

La propuesta tiene 3 objetivos: frenar el incremento en el costo de las rentas, crear un registro digital de contratos de arrendamiento, y la obligación del Gobierno de la CDMX para la producción pública de vivienda para arrendamiento.

Aunque por años las autoridades han señalado el déficit de vivienda y las acciones para abatirlo, nuestra realidad, es todavía más compleja que décadas atrás.

Muchas personas aún anhelan tener vivienda propia, pero ante la oferta de vivienda insuficiente, los costos elevados y sin poder acceder a un crédito, adquirirla es más que un sueño.

Sin embargo, ¿No es objetivo del INVI atender a quienes no tienen manera de acceder a un crédito tradicional para adquirir vivienda?

A pesar de su fracaso, el INVI. será responsable de producir la vivienda para arrendamiento La pregunta es si podrá con 3 tareas, o cuál será su prioridad:

Construir vivienda social y popular para que la puedan adquirir las personas; terminar las viviendas de reconstrucción, o producir vivienda para que el gobierno participe en el mercado inmobiliario y la oferte en renta.

Recordemos que en la Ciudad de México, toda persona tiene derecho a una vivienda digna y adecuada. En consecuencia, la Ley de Vivienda precisa que el derecho consiste en tener para sí o su familia, una vivienda con mejora continua de sus condiciones.

La iniciativa deja claro que habrá vivienda para renta, se construirá con recursos públicos y solo para personas de bajos ingresos, atendiendo a la población que ya encuentra respuesta en la oferta existente, limitándola a la que ofrece el Estado.

Habrá quienes sostengan que la propuesta es innovadora, sin embargo, a la luz de la Ley de Vivienda no es así. Ya existe esa posibilidad; es más, incluso con una población objetivo más amplia: los grupos de atención prioritaria. ¡Vaya regresión!

En vez de progresividad en el derecho a la vivienda, se antepone el discurso del líder morenista “primero los pobres”, y elimina la posibilidad de vivienda en renta a mujeres, jóvenes, víctimas, de identidad indígena, afrodescendientes, entre otros.

Quedaron olvidadas las propuestas de campaña que, hace 6 años, hizo Claudia Sheinbaum como candidata al gobierno de la CDMX: mejorar las condiciones de viviendas existentes y garantizar oferta de vivienda nueva para las y los capitalinos, y eso incluía contar con vivienda social o popular.

Debe cuestionarse al gobierno la falta de participación del Instituto de Planeación, pues los Planes y Programas que le corresponde elaborar podrían plantear resultados a mediano y largo plazo.

En cambio, para evitar incrementos en las rentas, se plantea restringir que entre los particulares puedan rentar una vivienda, ya que a fin de ser autorizado de inmediato, se debe inscribir en un registro digital.