Por: Daniel Gabriel Ávila Ruiz
Las elecciones de este 1 de julio se caracterizaron por una alta participación ciudadana. De los 89 millones de ciudadanos inscritos en la lista nominal, votaron alrededor de 63%. La concurrencia a las urnas muestra la fortaleza de las instituciones democráticas y el avance ciudadano en los procesos electorales. También refleja la confianza depositada en el Instituto Nacional Electoral (INE).
La mayoría de los electores sufragaron por el candidato de Andrés Manuel López Obrador, quien obtuvo cerca de 53% de la votación emitida. En tanto, Ricardo Anaya, de “México por el Frente” alcanzó 22.5% de las preferencias y José Antonio Meade de la “Alianza todos por México” obtuvo 16.4%.
En cuanto a las gubernaturas -en espera de la entrega de las constancias de mayoría- es notoria la ventaja de “Juntos haremos historia” en Ciudad de México, Morelos, Tabasco, Veracruz y Chiapas. En tanto, el PAN triunfaría en Guanajuato, Puebla -refrenda ambos estados- y recupera Yucatán, lo que concluye 12 años de gobiernos priistas en dicha demarcación del sureste mexicano.
En estas elecciones los ciudadanos renovaron a sus representantes en la Cámara de Diputados y el Senado de la República. En el Palacio Legislativo de San Lázaro la Coalición “Juntos haremos historia” tendrá aproximadamente 303 de 500 escaños; por lo que Morena será la primera fuerza en el Pleno con 185 legisladores; mientras que PT (62) y PES (56) se acercan a la tercera y cuarta representación más numerosa. De forma preliminar, México por el Frente tendrá cerca de 140 diputados, por lo que el PAN será primera minoría con 92; Movimiento Ciudadano 29 y PRD sumará 19. Finalmente, Todos por México alcanzó 57 representantes: 40 del PRI, 15 del Verde y dos de Nueva Alianza. Estos datos son aproximaciones y será el INE quien informe los datos oficiales.
Mientras tanto, el Senado de la República tendrá 55 miembros de Morena, 23 del PAN, 13 del PRI, nueve del PES, ocho del PRD, siete de Movimiento Ciudadano, seis del PT, cinco del Verde y dos de PANAL. De mantenerse esta situación no habrán ganado candidatos independientes a ambas Cámaras del Poder Legislativo.
En estos comicios también se celebraron elecciones locales para renovar Congresos estatales, alcaldías y regidurías. Por lo que el país vivió una fiesta de la democracia a lo largo y ancho de su geografía. Pese a ciertas anomalías reportadas ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE), fueron comicios organizados y transparentes. Lamentablemente, la violencia apareció a lo largo de los meses de campaña con más de un centenar de candidatos asesinados o amenazados.
Un logro más de estos comicios es que por primera vez en la historia de la democracia mexicana, las mujeres serán mayoría en el Senado de la República, mientras que la Cámara de Diputados tendrá una conformación paritaria.
Ahora toca el turno a los ciudadanos, quienes debemos exigir rendición de cuentas, máximo acceso a la información y que los funcionarios presenten todas sus declaraciones.
Senador por el PAN