/ martes 8 de octubre de 2024

Retos de Claudia Sheinbaum como Presidenta

Por Brenda Jaramillo R.

Claudia Sheinbaum, en su papel como primera presidenta de México, se enfrenta a una serie de retos complejos que derivan no solo de la situación actual del país, sino del legado que deja el sexenio de Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

Si bien la administración de AMLO logró pocos avances importantes en ciertos sectores, también ha sido objeto de críticas por fallas estructurales en áreas clave como seguridad, economía, y el manejo de la pandemia. Sheinbaum deberá equilibrar el mantenimiento de la agenda de la Cuarta Transformación (4T) con la necesidad de corregir los aspectos más criticados del gobierno de su predecesor.

1. Seguridad y Violencia.

Uno de los mayores desafíos que Sheinbaum hereda es la crisis de seguridad. Durante el sexenio de AMLO, México ha registrado algunos de los años más violentos de su historia reciente, con niveles récord de homicidios y la persistencia de grupos del crimen organizado. La estrategia de "abrazos, no balazos" fue duramente criticada por no lograr reducir la violencia ni contener el poder del narcotráfico. Sheinbaum necesitará articular una estrategia más efectiva para combatir la violencia sin abandonar por completo los principios de no militarización, pero al mismo tiempo generar resultados tangibles que disminuyan la percepción de inseguridad en el país.

2. Crecimiento Económico y Desigualdad.

Otro reto significativo es el estancamiento económico. A pesar de las promesas de AMLO de poner fin a la corrupción y dirigir los recursos hacia los más necesitados, la economía de México creció a un ritmo mucho más lento de lo esperado durante su administración, con el impacto devastador de la pandemia de COVID-19 acentuando la crisis. La inflación, el desempleo y la creciente pobreza son problemas que no pueden esperar. Sheinbaum deberá encontrar maneras de reactivar la economía mediante políticas que favorezcan tanto el crecimiento como la redistribución de la riqueza, al tiempo que mantiene los programas sociales que son el pilar de la 4T y los que más seguidores les consigue.

3. Transición Energética y Medio Ambiente.

La política energética de AMLO, basada en fortalecer a Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), ha sido criticada por, claramente, ir en contra de las tendencias globales hacia energías renovables y de sustentabilidad. Sheinbaum, con un historial más progresista en temas ambientales, debería sentirse inclinada a hacer un cambio en esta dirección, pero deberá sortear las expectativas de mantener la soberanía energética y los intereses creados en el sector de hidrocarburos, así como evitar incomodar a su antecesor. La transición hacia energías limpias es un imperativo mundial, y México, con su gran potencial en energías renovables, tiene la oportunidad de liderar en este campo, siempre y cuando haya voluntad política.

4. Relaciones Internacionales.

En el ámbito internacional, Sheinbaum enfrentará el reto de redefinir la relación de México con Estados Unidos, en un contexto de tensiones comerciales y migratorias. Si bien AMLO mantuvo una relación pragmática con el expresidente Donald Trump y el actual presidente Joe Biden, las políticas migratorias de México, particularmente el uso de la Guardia Nacional para detener flujos migratorios, han sido motivo de controversia. Sheinbaum deberá equilibrar las exigencias de Estados Unidos con una política migratoria que respete los derechos humanos y no dependa exclusivamente de militarización.

5. Combate a la Corrupción y Fortalecimiento Institucional.

Uno de los principales pilares del discurso de AMLO fue el combate a la corrupción, aunque se haya quedado solo en palabras, ya que es claro que la corrupción no ha sido erradicada de las instituciones públicas. Sheinbaum deberá continuar esta lucha, pero también mejorar la capacidad institucional del país. Esto implicará no solo sancionar a quienes cometan actos de corrupción, sino también fortalecer las instituciones para que sean más transparentes, eficientes y menos susceptibles a prácticas corruptas.

Conclusión

Claudia Sheinbaum se encuentra ante una presidencia histórica y sumamente desafiante. Aunque hereda la popularidad de la 4T y una base sólida de apoyo político, los retos que deja el sexenio de AMLO requieren respuestas inmediatas y efectivas. Lograr un equilibrio entre continuar con las políticas de transformación y rectificar los errores, que no son pocos, será crucial para que su gobierno tenga éxito y para que pueda consolidar un legado propio, alejado de la sombra de López Obrador y de su lamentable administración.

Por Brenda Jaramillo R.

Claudia Sheinbaum, en su papel como primera presidenta de México, se enfrenta a una serie de retos complejos que derivan no solo de la situación actual del país, sino del legado que deja el sexenio de Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

Si bien la administración de AMLO logró pocos avances importantes en ciertos sectores, también ha sido objeto de críticas por fallas estructurales en áreas clave como seguridad, economía, y el manejo de la pandemia. Sheinbaum deberá equilibrar el mantenimiento de la agenda de la Cuarta Transformación (4T) con la necesidad de corregir los aspectos más criticados del gobierno de su predecesor.

1. Seguridad y Violencia.

Uno de los mayores desafíos que Sheinbaum hereda es la crisis de seguridad. Durante el sexenio de AMLO, México ha registrado algunos de los años más violentos de su historia reciente, con niveles récord de homicidios y la persistencia de grupos del crimen organizado. La estrategia de "abrazos, no balazos" fue duramente criticada por no lograr reducir la violencia ni contener el poder del narcotráfico. Sheinbaum necesitará articular una estrategia más efectiva para combatir la violencia sin abandonar por completo los principios de no militarización, pero al mismo tiempo generar resultados tangibles que disminuyan la percepción de inseguridad en el país.

2. Crecimiento Económico y Desigualdad.

Otro reto significativo es el estancamiento económico. A pesar de las promesas de AMLO de poner fin a la corrupción y dirigir los recursos hacia los más necesitados, la economía de México creció a un ritmo mucho más lento de lo esperado durante su administración, con el impacto devastador de la pandemia de COVID-19 acentuando la crisis. La inflación, el desempleo y la creciente pobreza son problemas que no pueden esperar. Sheinbaum deberá encontrar maneras de reactivar la economía mediante políticas que favorezcan tanto el crecimiento como la redistribución de la riqueza, al tiempo que mantiene los programas sociales que son el pilar de la 4T y los que más seguidores les consigue.

3. Transición Energética y Medio Ambiente.

La política energética de AMLO, basada en fortalecer a Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), ha sido criticada por, claramente, ir en contra de las tendencias globales hacia energías renovables y de sustentabilidad. Sheinbaum, con un historial más progresista en temas ambientales, debería sentirse inclinada a hacer un cambio en esta dirección, pero deberá sortear las expectativas de mantener la soberanía energética y los intereses creados en el sector de hidrocarburos, así como evitar incomodar a su antecesor. La transición hacia energías limpias es un imperativo mundial, y México, con su gran potencial en energías renovables, tiene la oportunidad de liderar en este campo, siempre y cuando haya voluntad política.

4. Relaciones Internacionales.

En el ámbito internacional, Sheinbaum enfrentará el reto de redefinir la relación de México con Estados Unidos, en un contexto de tensiones comerciales y migratorias. Si bien AMLO mantuvo una relación pragmática con el expresidente Donald Trump y el actual presidente Joe Biden, las políticas migratorias de México, particularmente el uso de la Guardia Nacional para detener flujos migratorios, han sido motivo de controversia. Sheinbaum deberá equilibrar las exigencias de Estados Unidos con una política migratoria que respete los derechos humanos y no dependa exclusivamente de militarización.

5. Combate a la Corrupción y Fortalecimiento Institucional.

Uno de los principales pilares del discurso de AMLO fue el combate a la corrupción, aunque se haya quedado solo en palabras, ya que es claro que la corrupción no ha sido erradicada de las instituciones públicas. Sheinbaum deberá continuar esta lucha, pero también mejorar la capacidad institucional del país. Esto implicará no solo sancionar a quienes cometan actos de corrupción, sino también fortalecer las instituciones para que sean más transparentes, eficientes y menos susceptibles a prácticas corruptas.

Conclusión

Claudia Sheinbaum se encuentra ante una presidencia histórica y sumamente desafiante. Aunque hereda la popularidad de la 4T y una base sólida de apoyo político, los retos que deja el sexenio de AMLO requieren respuestas inmediatas y efectivas. Lograr un equilibrio entre continuar con las políticas de transformación y rectificar los errores, que no son pocos, será crucial para que su gobierno tenga éxito y para que pueda consolidar un legado propio, alejado de la sombra de López Obrador y de su lamentable administración.

ÚLTIMASCOLUMNAS