El próximo 1 de julio el Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) cumplirá cuatro años de su entrada en vigor y tan sólo faltan dos años para su primera revisión.
La nueva era comercial entre los tres países comenzó el 1 de julio de 2020, cuando entró en vigor el T-MEC, acuerdo que sustituyó al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
¿Cómo empezó?
Recordemos que el 11 de junio de 1990, los presidentes de México, Carlos Salinas de Gortari, y de Estados Unidos, George W. Bush, se reunieron por primera vez a fin de analizar la posibilidad de realizar un acuerdo comercial entre las dos naciones, pero no fue sino hasta el 8 de agosto de 1990 que comenzaron las conversaciones formales para lograr un acuerdo.
Posteriormente Canadá pidió ser incluido en el acuerdo y finalmente el 17 de diciembre de 1992, el presidente Bush, el primer ministro de Canadá, Brian Murleoney, y Carlos Salinas de Gortari, firmaron el TLCAN, formando el bloque económico y el área de libre comercio más grande del mundo.
El TLCAN entró en vigor hasta el 1 de enero de 1994 y de inmediato se registraron beneficios, pues se tiene registro que entre 1993 y 2015, el comercio entre los tres países se cuadruplicó, pasando de 297 mil millones de dólares, a 1.14 billones de dólares.
Transcurrieron los años y fue hasta que Donald Trump llegó a la Casa Blanca cuando amenazó con sacar a Estados Unidos del acuerdo, si éste no era “modernizado”.
El 16 de agosto de 2017, comenzaron las negociaciones para modernizar el TLCAN en la ciudad de Washington, con los gobiernos de México y Estados Unidos.
Las negociaciones entre la canciller canadiense y jefa negociadora para el TLCAN, Chrystia Freeland, y el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, llegaron a un acuerdo
El 30 de septiembre, los negociadores estadunidenses y canadienses llegaron a un acuerdo para actualizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte; el nuevo pacto comercial reemplazaría al TLCAN, firmado en 1994.
El 30 de noviembre de ese mismo año, Enrique Peña Nieto, Donald Trump y Justin Trudeau firmaron el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en el marco de la cumbre del Grupo de los 20 (G20) que se celebra en Buenos Aires, Argentina.
Después de un año de ajustes adicionales al acuerdo, el 10 de diciembre de 2019, el subsecretario para América del Norte, Jesús Seade; la viceprimera ministra de Canadá, Chrystia Freeland, y el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, firmaron cambios al T-MEC frente al presidente Andrés Manuel López Obrador, en Palacio Nacional.
Ese día el mandatario mexicano destacó que el T-MEC beneficiará a la economía de México y la región. “Significa mayor inversión para Canadá, Estados Unidos y México”
En ese entonces las partes se comprometieron a una revisión del acuerdo en el sexto aniversario de su entrada en vigor. Si todas las partes pactan continuarlo, permanecerá vigente por otros 16 años. Si una parte no confirma su deseo de extender el plazo del acuerdo por otro período de 16 años, las partes llevarán a cabo una revisión conjunta del acuerdo cada año.
Peo ¿cuáles son las diferencias entre el TLCAN y el T-MEC?
El TLCAN cuenta con 22 capítulos, mientras que el T-MEC se compone por 34 capítulos, en donde las adiciones y modificaciones a los capítulos que constituyen el T-MEC implican importantes cambios con respecto al TLCAN, particularmente en temas como industria automotriz, normas laborales, propiedad intelectual y medicamentos, comercio digital, normas ambientales y combate a la corrupción.
También contempla un requisito de integración de 70 por ciento de acero y aluminio de la región.
Los especialistas prevén que tras los comicios del 5 de noviembre en Estados Unidos, el vencedor podría ser Donald Trump, lo que implica que su segundo mandato será más radical y las políticas contra México más severas.
Así que la primera revisión del Tratado se dará en un contexto de factores geopolíticos y una gestión de riesgos operativos muy distintos a los que se observaban en 2017, cuando Trump fue presidente e inició la renegociación del tratado.
México tiene una muy buena oportunidad bajo el nearshoring, y si bien la revisión del T-MEC es una prueba de fuego importante para los nuevos gobiernos, tanto en México como en Estados Unidos, la coyuntura internacional podría ayudarle. Veremos.