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Jimmy Donaldson, mejor conocido como Mr. Beast, ha sido un pionero en el mundo del entretenimiento digital. Con más de 300 millones de suscriptores en YouTube, su éxito ha sido impulsado por su capacidad para llevar los desafíos extremos y el espectáculo a niveles nunca antes vistos. En este contexto, su reality show Beast Games, en colaboración con Amazon Prime, parecía ser la culminación lógica de su carrera: una competencia de supervivencia donde mil participantes compiten por un premio de 5 millones de dólares. Sin embargo, lo que prometía ser otro proyecto exitoso ahora está envuelto en polémica debido a una demanda colectiva presentada por cinco concursantes del show, quienes lo acusan de maltrato crónico, acoso sexual y condiciones laborales inhumanas
La demanda, interpuesta en la Corte Superior de Los Ángeles, alega que los participantes fueron sometidos a condiciones degradantes, desde la falta de descanso adecuado y comida hasta la exposición a situaciones peligrosas. Además, las concursantes femeninas denunciaron un ambiente de trabajo hostil, agravado por casos de acoso sexual y negligencia por parte de la producción
La paradoja es que los concursantes firmaron contratos al comenzar el programa, aceptando participar en un reality que sabían sería difícil y, al parecer, con estas condiciones. No obstante, los demandantes afirman que las condiciones que enfrentaron superaron con creces lo que se les había comunicado previamente, incluso resultando en hospitalizaciones y secuelas emocionales y físicas. Aunque parte de la responsabilidad parece estar en las productoras involucradas, Mr. Beast es el rostro más visible de esta controversia debido a su popularidad e influencia.
Este caso plantea una disyuntiva interesante sobre la relación entre los creadores de contenido e influencias globales como Mr. Beast y sus audiencias, especialmente los más jóvenes. Los influencers, especialmente aquellos con grandes bases de seguidores en redes sociales como Instagram, YouTube, TikTok y otras plataformas, pueden llegar a una audiencia global masiva. El marketing de influencers se ha convertido en una industria multimillonaria. Se estima que el mercado global del marketing de influencers alcanzó un valor de 21.1 mil millones de dólares en 2023. Según estudios, el 86% de los adolescentes y jóvenes en EE.UU. utilizan YouTube de manera regular, y muchos consideran a los creadores de contenido como figuras aspiracionales o de confianza.
A pesar de que los participantes firmaron contratos, el consentimiento informado sigue siendo un tema clave. ¿Hasta qué punto un concursante puede prever los riesgos de un reality show? Y más importante aún, ¿cuál es la responsabilidad de las plataformas como Amazon para garantizar la seguridad y el bienestar de los participantes? Claro, mientras no sean actuados como en algunos casos pasa en nuestro país engañando al público de algo, real, siendo “fake”.