Desde 1942, la casa joyera mexicana y de lujo, Tane, se ha dedicado a innovar y renovar la industria, con propuestas que son atesoradas no solo por su belleza y valías de una obra perdurable, sino por su estilo y originalidad.

Recientemente, la firma lanzó su nueva colección que hasta ahora, es considerada como la más extensa de su historia: ANIMALES, un espléndido homenaje a la fauna de México, así como un llamado a valorarla y apoyar en su preservación.

Son 55 piezas distintas, elaboradas a mano por los maestros orfebres más calificados del país. Confeccionadas en plata .925, plata vermeil de 23 quilates y oro amarillo de 18 quilates, las nuevas propuestas subrayan una idea central en la filosofía de la marca: “el buen diseño es crear la forma adecuada para su óptima realización en plata, junto con una calidad extraordinaria. Se trata de excelencia, el atributo distintivo de Tane”.

Esta antología también representa una construcción metafórica, una invitación a descubrir las características y los rasgos que compartimos con diferentes especies, como la agilidad, el poder, la osadía y la fuerza.

Además es una ruta de acceso para encontrar en cada joya un medio de expresión que relate una historia de personalidad, simbología y cualidades específicas. Asimismo, explorar el instinto y las particularidades que hacen única a cada persona constituye una de las directrices narrativas que estructuran esta línea de joyería contemporánea, en la que están presentes todos los signos de identidad de la casa joyera: carácter propositivo, manufactura perfecta, pureza de trazos y belleza atemporal.

SERPIENTE, SINUOSA ELEGANCIA: La serpiente –criatura legendaria que encarna el poder, la elegancia el respeto y la sofisticación, se mueve de manera fluida y sinuosa. TANE transforma cada movimiento, así como su extraordinaria textura, en delicadas líneas hechas de plata. La serpiente posee una gran importancia cultural en México, la cual aún se puede apreciar en las estructuras arquitectónicas de las grandes civilizaciones prehispánicas.

TORTUGA, CRIATURA ANCESTRAL: Símbolo de la fertilidad, paciencia, perseverancia y sabiduría, la tradición refiere que las tortugas también son animales que brindan protección. Viviendo tanto en el agua como en la tierra, estos reptiles ancestrales habitan dos mundos distintos con facilidad. La firma ha tomado estas características, junto con el encanto distintivo de estas criaturas prehistóricas, para recrearlas mediante una estética depurada que captura todo el brillo y esplendor de la plata más pura.

JAGUAR, MAJESTUOSO FELINO: Extraordinariamente fuerte, el jaguar se desliza como una sombra misteriosa y silente, atravesando la jungla de forma intuitiva, veloz, única. Con su piel moteada –que refleja el sol através de los árboles durante el día, y la belleza de la luna a lo largo de la noche–. En esta colección de plata con acentos vermeil. En la cosmogonía prehispánica, el jaguar ostenta un vínculo entre la noche y las deidades, posicionándose como una de las especies más importantes de nuestra historia.

QUETZAL, MÍTICO PLUMAJE: Cuando los dioses crearon el cielo, también formaron una gema asombrosa para completar su obra: el quetzal, que nació cuando los creadores Kukulkán y Tepeu soplaron sobre un árbol de Guayacán. Con el soplo divino, las hojas azul verdosas cayeron y, mientras llegaban al suelo, tomaron la forma de un ave con largo plumaje. Venerado, etéreo y emblema de emancipación, el quetzal es una de las aves emblemáticas de nuestro país. Su mítico plumaje ahora está inmortalizado en plata, mediante largas y elegantes líneas que acentúan la gracia de esta criatura que solo cantará de nuevo cuando la tierra sea verdaderamente libre.

ESCARABAJO, IMPRONTA LEGENDARIA: Tal como relata la leyenda maya de la princesa Cuzán y su amado Chalpol, los escarabajos deben llevarse cerca del corazón, pues ahí reside el verdadero amor. Este asombroso animal, de singular y enigmática belleza, encarna lo sublime, la protección, la delidad y la fe. La casa ha convertido este coleóptero excepcional en joyas de plata .925 que se distinguen por su simetría depurada y trazo contundente, listas para ocupar el lugar que les corresponde: cerca del corazón.