La diseñadora neoyorquina busca preservar su legado a través de la tecnología para “descargar su cerebro” y proteger su invaluable esencia
Graduada del Fashion institute of Technology, con una carrera en Ilustración de moda, la diseñadora neoyorquina Norma Kamali se consolida como una de las creadoras más importantes de la industria de la moda, gracias a su propuesta basada en una visión futurista.
Sus primeros pasos en la moda se dieron en 1967, cuando inauguró su primera tienda en el 229 de la calle East Fifty-Third en Nueva York, donde vendía la ropa que traía de sus viajes de trabajo a Londres. Un año más tarde, comenzó a diseñar sus propias colecciones que destacaban por su gran elaboración y estilo único.
Con la idea de crear “la ropa vintage del futuro”, Kamali inició su exitosa trayectoria confeccionando diseños alineados a sus experiencias por el mundo, enfocados a la comodidad y a la modernidad que inspiraron a nuevos diseñadores y generaciones futuras.
El abrigo-saco de dormir, la ropa deportiva y lista para usar como un estilo de vida global, los tenis deportivos con tacón, la colección “Parachute”, al igual que trajes de baño que fueron referente para muchas empresas fabricantes de este tipo de prenda durante décadas; telas fáciles de lavar y usar, y colecciones de punto jersey, son algunos de los referentes de su creación
A sus 78 años, la diseñadora estadounidense sigue enfocada en la innovación, buscando adaptar su experiencia a las posibilidades que ofrece la inteligencia artificial (IA).
Su interés por el avance tecnológico se dio en su primer trabajó como agente en las aerolíneas Northwest Orient Airlines, operando una computadora UNIVAC. Desde entonces, ha persistido, buscando constantemente diferentes maneras de incorporarla en su negocio.
Con su preocupación por el futuro, tanto en lo personal como el de su empresa, Kamali se ha sumergido en el mundo de la realidad virtual. Impulsada por la idea de desarrollar un programa inteligente que le permite, "descargar su cerebro" y seguir siendo la guía de su negocio. Este proceso lo lleva a cabo por medio del reconocimiento de imágenes e ideas sobre sus colecciones pasadas y su larga trayectoria.
“El modelo comenzará realmente a estar en proceso de descargar mi cerebro, para que cuando entrene a otras personas aquí para seguir lo que he hecho, el legado de la empresa literalmente pueda continuar y perdurar. Tengo la ventaja de eso porque son 56 años de contenido. Es muy emocionante. Le da a mi empresa un valor realmente grande, de una manera que nadie habría pensado antes”, dijo Kamali en entrevista.
El incorporar herramientas de innovación artificial en un proceso tan íntimo como el diseño podría perder personalidad y singularidad. Sin embargo, la directora creativa utilizará este experimento para explorar ideas que combinen lo que ella ha hecho en el pasado en algo único e innovador.
“¿Cuál es la razón de ser de este producto?” dijo sobre sus propias dudas acerca de las habilidades y capacidades de la inteligencia artificial.
Kamali está convencida de que la creatividad continuará siendo fundamental. Destacó que la originalidad humana es diferente de la inteligencia artificial.
"Hay cosas que la inteligencia artificial no podrá reemplazar", dijo. "Pero la IA proporcionará nuevas oportunidades que no podemos resistir".
➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes del suplemento #SOY
Norma Kamali ha estado a la vanguardia de la moda durante décadas, y su reciente incursión en la era digital, como parte del proceso creativo, es un reflejo de su continua evolución.
Su enfoque en la tecnología, no sólo se centra en la eficiencia operativa, sino también en la expansión de los límites creativos en el diseño de moda, explorando los nuevos caminos de la modernidad.