Tras el auge de los microbolsos y en el lado opuesto, los bolsos en tamaño XL, llegan a las pasarelas y las calles en diseños cargados de funcionalidad. De Balenciaga a Prada y entre famosas como Chiara Ferragni, las gemelas Olsen o Rosalía, este tamaño de bolso se erige como el favorito.

Estas piezas, que parecen desafiar la lógica del minimalismo, han invadido tanto las pasarelas más prestigiosas como las calles de las principales capitales de la moda y también el día a día del público joven, al ser un complemento idóneo para largas jornadas de trabajo y ocio.

La resurrección de los bolsos grandes no ha sido casualidad. Grandes casas de moda y diseñadores emergentes han apostado fuertemente por este regreso, proponiendo nuevos estilos y renovando clásicos para hacer del bolso maxi una pieza icónica.

Balenciaga, bajo la dirección creativa de Demna Gvasalia, ha sido uno de los principales diseñadores que promueven la idea de revivir la moda de los maxi bolsos. En sus recientes colecciones, el diseñador ha incluido bolsos de tamaño XXL, que parecen desafiar la proporción y la utilidad.

Uno de los más emblemáticos ha sido el Shopping Tote, un bolso que recuerda a las bolsas del supermercado pero en versión de lujo. Hecho en piel de alta calidad, este bolso ha sido reinterpretado en diferentes colores y texturas, y ha sido visto en varias celebridades que apuestan por la funcionalidad sin sacrificar el estilo.

Otro jugador clave en este resurgimiento es Bottega Veneta. La marca italiana, conocida por su intrincado trabajo en cuero y su famoso ‘intrecciato’ (técnica de tejido), ha apostado por modelos de bolsos maxi en varias de sus colecciones recientes.

Daniel Lee, al frente de la firma hasta finales de 2021, presentó bolsos como el Jodie y el Arco, en versiones maxi que rápidamente se convirtieron en un objeto de deseo entre los amantes de la moda. Estas piezas combinan lujo, artesanía y practicidad, haciendo de ellas una declaración versátil.

Prada es otro nombre que ha sido clave en la vuelta de los bolsos grandes. La marca italiana ha logrado hacer de los bolsos maxi una parte integral de su visión de la moda utilitaria y sofisticada.

Miuccia Prada, la mente creativa detrás de la casa, ha introducido modelos como el ‘Galleria’ y el ‘Double’, con un enfoque en la practicidad diaria, pero sin dejar de lado el toque refinado que caracteriza a la firma en materiales ligeros y resistentes, combinados con un diseño elegante y minimalista.

➡️ Únete al canal de El Sol de México en WhatsApp para no perderte la información más importante

El diseñador francés Simon Porte Jacquemus ha sido célebre por sus juegos con las proporciones en el mundo de la moda. Tras el furor de sus mini bolsos ‘Le Chiquito’, que causaron sensación en temporadas pasadas, Jacquemus decidió dar un giro inesperado al lanzar versiones maxi de sus icónicos bolsos.

Este contraste entre lo extremadamente pequeño y lo exageradamente grande se ha convertido en una marca registrada del diseñador. Sus bolsos maxi, con líneas simples y colores vibrantes, han capturado la atención tanto de los prescriptores de moda como de las celebridades, que ven en ellos una mezcla de arte y funcionalidad.

Famosas que apuestan por los maxi bolsos

El renacimiento de los bolsos maxi no estaría completo sin el respaldo de las celebridades más influyentes del momento. En la era de las redes sociales, donde las imágenes de la moda urbana se viralizan a una velocidad vertiginosa, las figuras del cine, la música y la moda han sido claves para poner en el radar esta tendencia.

La cantante española Rosalía, famosa tanto por su música como por su estilo extravagante, ha adoptado la tendencia de los maxi bolsos con entusiasmo. Rosalía ha sido vista con versiones XL de Louis Vuitton y Jacquemus, llevando el concepto de "más es más" a nuevas alturas.

Sus elecciones estilísticas, siempre vibrantes y llenas de personalidad, demuestran que un bolso grande puede ser el complemento ideal para un look maximalista, donde cada detalle cuenta para construir una estética única.

La supermodelo Kendall Jenner ha sido una de las primeras en abrazar la vuelta de los maxi bolsos. En múltiples ocasiones ha sido fotografiada por las calles de Nueva York o Los Ángeles luciendo modelos de Balenciaga o Bottega Veneta, combinados con estilismos casuales pero siempre sofisticados.

Rihanna es conocida por su capacidad de tomar riesgos estilísticos y llevar cualquier tendencia a su terreno personal. La cantante y empresaria ha sido vista llevando bolsos maxi en diferentes ocasiones, desde eventos de alfombra roja hasta sus salidas diarias en Nueva York.

Uno de los momentos más comentados fue cuando llevó un enorme bolso de Jacquemus durante un paseo por las calles de París. Su elección de colores brillantes y diseños atrevidos, como los bolsos, muestra que la estrella no tiene miedo de destacar y romper las reglas de la moda.

Zoë Kravitz, ícono del estilo boho-chic y minimalista, también ha apostado por los maxi bolsos, demostrando que estos accesorios pueden ser perfectamente compatibles con un estilo sobrio. La actriz ha sido fotografiada en múltiples ocasiones llevando bolsos grandes de cuero negro o marrón, que complementan su estilo casual y desenfadado.

Kravitz, quien generalmente opta por una paleta de colores neutros y líneas limpias, ha demostrado que un bolso grande puede ser la pieza central de un conjunto sin necesidad de adornos excesivos.

Por su parte, la cantante británica Dua Lipa se ha convertido en una de las mayores exponentes de la moda vanguardista, y los maxi bolsos han sido parte esencial de su repertorio de accesorios.

Dua ha sido vista luciendo modelos oversized de Prada y Balenciaga, combinándolos con prendas de sello urbano que reflejan su estilo personal y en constante evolución. Su habilidad para mezclar prendas de alta costura con ropa de calle hace que los bolsos grandes sean un complemento perfecto para sus conjuntos siempre llamativos.

El éxito de estos accesorios reside en su capacidad para combinar funcionalidad con un sentido de lujo y diseño elevado. Las casas de moda han sabido jugar con las proporciones, los materiales y los detalles para transformar una pieza tradicionalmente práctica en un símbolo de estatus y estilo personal.