La cúrcuma se obtiene del rizoma de la planta cúrcuma longa, perteneciente a la misma familia que el jengibre. En biología, un rizoma es un tallo subterráneo con varias yemas que crecen de forma horizontal emitiendo raíces y brotes herbáceos de sus nudos.
De acuerdo a estudios de la Universidad de Texas confirman múltiples beneficios de la cúrcuma para tu salud. Te decimos algunos de ellos:
Previene y combate el cáncer
Es un potente antioxidante, protege al organismo de radicales libres. Por eso es un aliado para la prevención y el combate de esa enfermedad.
Es un neuroprotector
Actúa sobre los metales pesados como el cadmio y plomo, por lo que protege tejidos del cerebro de estas sustancias dañinas.
Protege al aparato digestivo
Reduce las molestias y de otros síntomas asociados con el Síndrome de Intestino irritable, colitis y otras molestias relacionadas.
Combate la artritis
Tiene virtudes antiinflamatorias a la par que los fármacos más potentes del mercado, pero con la diferencia, de que la cúrcuma es natural.
Depurativo hepático
Aumenta el flujo de la bilis y rejuvenece las células de ese órgano del hígado por lo que puede detener el daño que la cirrosis provoca a ese órgano.
USO GASTRONÓMICO
La cúrcuma es un ingrediente muy usado en la cocina oriental y asiática, es famoso en la elaboración de curry y también es usado como colorante natural. En la India es muy venerada, incluso, hay varios rituales al rededor de ella.
Esta raíz es muy versátil, pues se le puede agregar prácticamente a todo; se puede comprar molida para añadir a cualquier platillo, le brinda color, sabor y aroma. También la puedes comprar entera y se recomienda agregar a cualquier guiso, al final, o sea después de la cocción, para que no pierda sus propiedades.
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