Hace tres años se retomó la tradición de la Corrida Guadalupana que nació en 1956 en el Toreo de Cuatro Caminos, un evento que se une a la celebración arraigada a la fe y devoción de los mexicanos.
El año pasado la corrida se convirtió en un festejo taurino a beneficio de los damnificados del sismo que sacudió al país y con el que el fideicomiso Fuerza México se comprometió a ayudar a las familias de la comunidad de Tlayacapan, Morelos, donde ya fueron entregadas 65 casas.
Esta ocasión La México abrió sus puertas a todos los aficionados para que disfrutaran del paseíllo que hicieron por el ruedo, Morante de la Puebla, Joselito Adame, Sergio Flores y Andrés Roca Rey con toros de diversas ganaderías.
A su llegada, los asistentes como Lula Sámano, Raúl Salinas, Juan Ramón de la Fuente, Ramón Neme, Justino Compeán, entre otros, quienes vistieron muy ad hoc con sombreros, botas, jeans, chamarras de cuero y flecos, fueron recibidos con un grupo en vivo que amenizó la tarde minutos antes de la corrida, además cuando se dirigían a sus lugares disfrutaron de la exposición pictórica El hombre frente al toro, del artista Chamejara.
En nuestro camino nos encontramos con el funcionario público Mikel Arriola quien se confesó un fanático de esta disciplina "La afición taurina estamos agradeciendo estos grandes carteles y estoy muy contento de estar aquí, hoy mi apoyo es para Sergio Flores", dijo a El Sol de México.