En los últimos días, Chiara Ferragni se convirtió en tendencia de las redes sociales, pero en esta ocasión, no fue por su lujoso estilo de vida o atrevido look, sino por haber engañado a sus más de 28 millones de seguidores en Instagram con una supuesta causa benéfica que al final resultó ser un fraude.
La influencer originaria de la ciudad donde “se fabrican los mejores violines del mundo”, Cremona, Italia, es una apasionada del mundo de la moda, industria que la llevó a crear su propio imperio, convirtiéndose en una famosa empresaria digital y un icono mundial.
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Inició su trayectoria en 2009 con el sitio web TheBlondeSalad.com, el blog dedicado a la moda y el estilo de vida, que con el tiempo se convirtió en una agencia de talento y marketing.
Años después, da vida a su firma homónima Chiara Ferragni brand, que inició con calzado y luego fue evolucionando con prendas y accesorios, así como una línea para niños y hasta cosméticos, con presencia alrededor del mundo y con la que ahora enfrenta uno de sus mayores escándalos y polémicas.
Ferragni, quien es hija del dentista Marco Ferragni, y de la escritora Marina Di Guardo, anunció su nueva colaboración con la empresa de alimentos Balocco, a través de sus redes sociales tal y como acostumbra hacerlo con todos sus proyectos.
Dicha alianza consistía en vender un pandoro, un típico bizcocho dulce navideño con su icónico logo, que está representando por un ojo caricaturesco en color azul y rosa, a más de 9 euros (el triple de lo habitual), prometiendo que la venta de cada uno supondría una donación para el Hospital Reina Margarita de Turín para poder adquirir una nueva maquinaria para el tratamiento terapéutico de niños con osteosarcoma y sarcoma de Ewing.
Sin embargo se descubrió que esta donación ya se había hecho "a priori" con fondos que no dependieron de la participación de Chiara, ni de su acción solidaria.
Por este motivo, la Autoridad Garante de la Competencia y del Mercado (AGCM) ha multado a ambas marcas por una “práctica comercial desleal” y deberán pagar aproximadamente un millón de euros.
Ante este escándalo, la también esposa del rapero Fedez, se pronunció ante sus seguidores, con un video de “disculpas” .
"Hola a todos. Siempre creí que los más afortunados tienen la responsabilidad moral de hacer el bien. Son los valores que siempre nos animaron a mi y a mi familia y que inculcamos a nuestros hijos. Les enseñamos que también se puede errar pero que, cuando ocurre, si es posible, hay que remediarlo", inicia su mensaje.
Y agregó"es eso lo que yo quiero hacer ahora. Pedir perdón y concretar mi gesto", comentando que todo fue “un error de comunicación”.
La famosa anunció que "devolverá" un millón de euros al hospital y que desafiará la sanción impuesta por la autoridad italiana pues es “desproporcionada e injusta”.
“En los próximos días hablaré con la reina Margarita para conocer cómo se empleará el dinero donado, periódicamente les contaré actualizaciones”, finalizó.
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Desde entonces, la empresaria quien tiene dos pequeños hijos, Leo y Victoria, no ha aparecido públicamente ni compartido su a día como lo suele hacer.
De acuerdo a medios internacionales, esta acción le ha costado la pérdida de importantes y millonarios contratos como su colaboración con Safilo Group, especializado en gafas de alta gama.
“Safilo Group comunica la interrupción del acuerdo de licencia para el diseño, producción y distribución de las colecciones de gafas con la marca Chiara Ferragni tras la violación de los compromisos contractuales de su titular”, se dio a conocer.
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