A pocas horas del estreno del polémico documental Harry & Meghan, la pareja más polémica de la realeza británica, asistió ayer por la noche a una gala en Nueva York para recibir un premio por la denuncia pública que hicieron contra “el racismo que existe dentro de la monarquía”.
Se trata de los premios Ripple of Hope que otorga la organización benéfica Robert F. Kennedy (RFK), cuyo propósito es honrar a líderes ejemplares de diferentes ámbitos que demuestran un compromiso con el cambio social y trabajan para promover la equidad, la justicia y los derechos humanos.
Dicho galardón ya lo han recibido varias celebridades y figuras destacadas como el presidente estadounidense Joe Biden, así como los expresidentes Barack Obama y Bill Clinton, Hillary Clinton, Kamala Harris, además de Bono y Geroge Clooney.
Para el evento que fue organizado por Kerry Kennedy, hija de Robert F. Kennedy y sobrina del expresidente Jonh F. Kennedy, el matrimonio viajó en vuelo privado de Los Ángeles a la Gran Manzana y desde su llegada, en todo momento estuvieron juntos, tomados de la mano y sonrientes.
Durante su discurso, agradecieron el reconocimiento y se comprometieron a seguir con su labor para erradicar la discriminación, “Juntos sabemos que una ola de esperanza puede convertirse en una ola de cambio”, dijo Harry.
También anunciaron su alianza con la fundación RFK para crear el premio de la Fundación Archewell para la Equidad de Género en el Cine Estudiantil, “Los valores de la Fundación RFK y de la Fundación Archewell están alineados en nuestra creencia del valor que tiene la valentía sobre el miedo y el amor sobre el odio”, añadió el príncipe.
Durante la gala, también se galardonó al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, además del presidente de la junta y director ejecutivo del Bank of America, Brian Moyniham, y con un premio póstumo como icono de los derechos civiles se rindió homenaje a Bill Russell, una leyenda de la NBA, que falleció este año.
Meghan Markle le copia el look a Kate Middleton, así fue el vestido que lució
Para la especial noche, en la que la pareja robó los reflectores durante toda la ceremonia, Meghan lució un atuendo en blanco, con un diseño muy parecido al que lució la princesa de Gales, Kate Middleton en la gala ambientalista que presidió junto a su esposo el príncipe Guillermo la semana pasada en Boston, según los medios internacionales y expertos en moda.
Se trató de un vestido blanco hecho a la medida por Louis Vuitton, con mangas largas, falda drapeada y una sutil apertura entre las piernas. El escote fue en hombros un poco más descubierto que el de Kate.
Como es costumbre, el cabello lo llevo recogido en un chongo, y el maquillaje fue tenue con sombra cobriza. Complementó con un clutch y stilettos negros.
Para la joyería su únicos accesorios fueron unos aretes largos brillantes. A manera de homenaje a la desaparecida, princesa Diana, lució el icónico anillo aguamarina valuado en alrededor de 90 mil dólares.
Por su parte, su esposo, el príncipe Harry vistió un elegante traje azul marino, con camisa blanca y corbata azul.