La quinta temporada de The Crown finalmente llegó a Netflix y con ella, la polémica sobre algunos de los personajes que hicieron su aparición por primera vez y que no son del agrado de la realeza británica.
⚠️ ALERTA SPOILER ⚠️
Entre los nombres que salieron a la luz en su primer capítulo fue el de Mohamed Al-Fayed, el cual en la vida real resultó ser una persona incómoda para la familia real debido a la cercanía que tuvo con Lady Di pues su hijo fue la última pareja de la llamada Princesa del Pueblo.
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¿Quién es Mohamed Al-Fayed?
Mohamed Al-Fayed es un millonario con residencia en el Reino Unido, siendo uno de los empresarios más importantes de la élite inglesa, sin embargo, la ironía radica en que el señor no era inglés y tampoco tenía ninguna relación con la monarquía, por lo que para poder llegar a tener un estatus similar tuvo que hacerse de muchos negocios.
Nació en Bakos, Alejandría, el 27 de enero de 1929. Tiene dos hermanos; Ali Fayed y Salah Fayed (fallecido en febrero de 2010).
Es el dueño del Hotel Ritz de París. Anteriormente, fue el dueño del equipo londinense Fulham F.C., equipo de la Premier League inglesa y de los grandes almacenes Harrods de la capital británica desde 1985 hasta su venta a la familia real catarí en mayo de 2010 por una cantidad cercana a los 1500 millones de libras.
En 2013, Forbes estimó la riqueza de Fayed en mil 400 millones de dólares estadounidenses, lo que sitúa su riqueza en el puesto número 1031 a nivel mundial.
De 1954 a 1956 estuvo casado con la escritora y editora Samira Jashogyi. Durante ese periodo Fayed trabajó en los negocios de su cuñado, el empresario de armas Adnan Khashoggi.
¿Qué pasó con Mohamed Al-Fayed y la familia real?
Mohamed Al-Fayed es el padre de Dodi, la pareja de la princesa Diana y que se encontraba con ella justo al momento de morir en un accidente de auto en París.
Fue justo tras la tragedia que el empresario se volvió una piedra en el zapato para la familia real británica, pues desde que su falleció a lado de Lady Di, siempre creyó que el MI6 participó en un complot contra la pareja.
Incluso, durante el juicio, que se desarrolló en 2007 tras la tragedia, el empresario aseguró que no había sido un accidente, sino un plan elaborado por el Servicio de Inteligencia Secreto, más conocido como MI6 o SIS, que es la agencia de inteligencia exterior del Reino Unido.
"Mi hijo y Diana fueron asesinada", dijo el empresario.
Incluso, Al-Fayed apoyó la teoría de que el Servicio Secreto británico veía a la princesa como "una amenaza para el trono, por lo que su popularidad le producía inestabilidad al Estado".
Y es que al parecer, el MI6 había vigiló e investigó a Diana, es decir, que había realizado espionaje contra la princesa.
Además, el magnate aseguró que había un descontento por parte de los Windsor al ver a la madre del futuro heredero y rey sosteniendo una relación y posible compromiso con un hombre musulmán.
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Lo anterior molestó a la monarquía británica, que además en el momento de la muerte de Lady Di estaba pasando por su peor momento de popularidad pues es bien sabido que la reina Isabel tardó varios días en mostrar sus respetos y condolencias cuando la gente se habían volcado con muestras de cariño hacia la princesa, que con su muerte paralizó no sólo a Reino Unido, sino al mundo entero.