En cuestión de diseño de oficinas, actualmente es muy importante crear proyectos que permitan al usuario tener momentos de reflexión y que cada uno de los detalles estén basados en los aspectos más importantes de su vida.
Estos preceptos llevaron a los arquitectos mexicanos Carlos Faci y Marina Leboreiro, socios fundadores del despacho Faci Leboreiro, a ganar el concurso Grands Prix du Design en Quebec, Canadá.
El diseño de interiores de su obra Estudio Basalto, obtuvo la certificación dorada en la categoría de oficinas en la decimoquinta edición del certamen, que reconoce la excelencia internacional y práctica ejemplar de diseñadores y arquitectos; está integrado por un jurado de destacados profesionales y académicos, así como por miembros internacionales de la prensa.
“El proyecto consistió en hacer unas oficinas para una firma de abogados que ejemplificaran el valor de su marca, como un despacho que aporta solidez y seriedad, a la vez que tiene un toque elegante y de frescura”, explica Marina Leboreiro.
El estudio se ubica en la zona de Santa Fe de la Ciudad de México y uno de los mayores retos fue, “diseñar unas oficinas de manera distinta a las tradicionales, las cuales, por lo regular, tienen un aspecto de seriedad con mucha madera, como un espacio preconcebido. La idea era cambiar este concepto de arquitectura y traducirla a algo elegante y serio pero a su vez, divertido con detalles de mucha textura, mucho ritmo, un juego de volúmenes entre luz y sólidos muy interesantes”, describe.
La arquitecta dice que los materiales empleados en el espacio fueron piedra basaltina rayada en todos los volúmenes; mármol portoro sobre la recepción y algunos muebles de madera de nogal y porcelanato en pisos. “Los pisos son de madera e incluimos papeles tapiz para dar calidez a las paredes de los espacios. En el plafón logramos un juego de vigas de dos tonos para generar un ritmo y una perspectiva interesante”.
Quienes ocupan el despacho es una pareja de abogados que son socios y a la vez matrimonio y esto inspiró a los creativos para dar forma a cada detalle. “Las áreas están unidas por la biblioteca, que es el corazón del lugar de todo el espacio. Es un proyecto muy poético y habla de la relación que tienen entre ellos y su unión profesional que existe dentro del despacho”.
Sobre la paleta de color la experta añade: “Utilizamos tonos neutros, y el rojo en la biblioteca significa el corazón del lugar. Son colores elegantes pensados en permitir la concentración y para que los usuarios puedan descansar y tener un momento de inspiración”.
Sobre la tendencia actual en el interiorismo de negocios, Leboreiro explica que se tiene que buscar desarrollar espacios donde se puedan realizar diferentes actividades y que realmente respondan a las necesidades que se desarrollen en ellos. “Que sean espacios privados en donde se puedan expresar emociones y nuevas ideas, espacios abiertos para compartir y comunicar.
“Tras la pandemia, la oficina debe dar paso a la salud mental, donde existan áreas en las que puedas refugiarte, canalizar tu ansiedad y compartir experiencias agradables, lugares donde te sientas apapachado y seguro, que incluyan una buena ventilación. Lo más importante de la arquitectura y el interiorismo es que estos deben responder siempre a las necesidades del usuario de manera estética, y permitan siempre compartir y ser parte de la identidad de la marca que nos contrata”.