Tras 25 años de labor altruista al frente de la Fundación Teletón, Fernando Landeros, expresó que, “es mi vida, durante este tiempo le he entregado a esta causa las mejores satisfacciones de mi vida y esa es la motivación más grande para continuar con esta misión a la que miles de mexicanos se unen cada vez más. Mi labor es orgullosamente terca”.
En 1997 fue cuando arrancó este proyecto, con el único objetivo de atender las necesidades de niñas, niños y adolescentes con discapacidad y las de sus familias.
“En 25 años ha cambiado todo, el país, la medicina, la tecnología, hasta los propios mexicanos y su pensamiento en torno a las causas benéficas y a la inclusión de personas con discapacidad, eso ha sido el resultado del gran trabajo como fundación”, dijo en entrevista exclusiva a Círculos Landeros.
Actualmente el Teletón brinda atención a 37 mil niños, ofreciéndoles una atención integral y de calidad que promueva su pleno desarrollo e inclusión a la sociedad. Además, ya cuenta con más de 20 Centros de Rehabilitación e Inclusión Infantil en la República Mexicana.
“Mi parte favorita del trabajo es cuando visito algún hospital, o un centro de rehabilitación, las reuniones con doctores o con las mamás de niños, conocer su historia y ver cómo les damos una esperanza de vida”, comentó.
El próximo 17 de diciembre se celebrará el evento anual de recaudación de fondos, con el que logran convocar a todo México promoviendo valores como el amor, la generosidad y la solidaridad y en el que año tras año han superado la meta, “Teletón representa la oportunidad de renovar la confianza en las personas y en las instituciones, simboliza la unión y el compromiso de diferentes sectores de la sociedad en torno a una causa social. Cada año hemos llegado al tope y ojalá eso siga por muchos años más”, comentó.
Nos confesó que cuando él iba a nacer, fue diagnosticado con parálisis cerebral, “es un diagnóstico que puede cambiar la vida no solo de la madre, sino de una de una familia entera, y creo que ese tema de sensibilidad, de solidaridad y sobre todo de resiliencia, ha marcado a mi familia y eso es lo yo quiero transmitir, con mi labor”.
Dijo que una de sus mayores enseñanzas al frente de esta institución es escuchar que los niños y jóvenes con alguna condición especial, “siempre tienen ganas de luchar, de seguir adelante y de que todos los días me dicen que están bien a pesar de su discapacidad, es una enseñanza de fortaleza y positivismo”.