GUANAJUATO.- Con el grito “estamos de pie”, el grupo cubano Formell y Los Van Van hicieron vibrar la Alhóndiga de Granaditas después de más de un año de espera. Las luces se encendieron y la música cubana cimbró en las decenas de personas que se dieron cita para mover la cintura al estilo cubano, y como es costumbre, quienes no alcanzaron boleto gratuito, hicieron de la banqueta y la calle una pista de baile.
Por unos minutos los habitantes de Guanajuato olvidaron la crisis sanitaria, sus problemas económicos o cualquier otro pesar. En el escenario los músicos pedían a gritos levantar las manos, mover la cintura y amenizar con aplausos una suerte de ritual a cambio de un poco de felicidad, de esa que la música regala. Y sin duda se logró, pues era notoria la alegría del público no sólo con la fiesta de los Van Van, sino con el regreso presencial del Cervantino que en 2022 cumplirá 50 años.
El grupo cubano estuvo acompañado por la Orquesta Filarmónica del Desierto, dirigida por Natanel Espinoza, quienes sin perder el ritmo guapachoso de Los Van Van hicieron segunda en el baile con canciones como el Huapango de Moncayo, y por más de 90 minutos se armó la fiesta al estilo cubano.
Así, bajo medidas sanitarias como el uso de cubrebocas –aún cuando es un espacio abierto- y un aforo reducido, la Alhóndiga de Granaditas revivió con la música y su público para volver a ser una de las sedes principales del FIC.
La agrupación cubana, fundada en 1969 por el bajista Juan Formell, puso en práctica sus experimentos al combinar elementos del rock y del jazz para construir un ritmo conocido como “songo” lo que les ha hecho acreedores de varios reconocimientos en más de 50 años de existencia, como el Grammy en el 2000.
Esperan 30 mil visitantes
Bajo la premisa de que la responsabilidad sanitaria no limita el disfrute de las artes, Mariana Aymerich, directora del FIC, inauguró la Sala de Prensa que marca el inicio de las actividades de la edición 49 de la fiesta del espíritu que se realiza de manera híbrida hasta el 31 de octubre.
Aymerich celebró "el aguante" de los invitados de honor, Coahuila y Cuba, pues aceptaron esperar más de un año luego de que en 2020 el festival se realizó de manera virtual por la pandemia. Y tras la espera, las representaciones artísticas del estado y país prepararon un panorama de lo mejor de su creación desde la música, la danza hasta las artes visuales.
El gobernador de Guanajuato, Diego Sinhué Rodríguez Vallejo, se adelantó con las expectativas sobre el número de visitantes y la derrama económica que prevé deje está edición: "Se esperan 30 mil personas en 19 días, que representa un aforo del 30 por ciento, la Secretaría de Turismo de Guanajuato estima una derrama económica de 32.2 millones de pesos, y 44 mil turistas, es decir una capacidad hotelera del 34 por ciento", señaló.
En representación de Alejandra Frausto, secretaria de Cultura federal, Marina Nuñez Bespalova, subsecretaría de Cultura, celebró que el festival resistió el año de la pandemia, y logró realizar el encuentro artístico a pesar de las adversidades de salud.
"Nos tocó un año difícil, nos agarró con las manos en la puerta; estábamos preparando ya esté festival cuando se vino la pandemia y tener compañeros como Cuba y Coahuila que han aguantado es una suerte, y estamos afortunadamente con dos formatos que son espacios que hemos ganado y no vamos a abandonar", refirió con lo que dio por inaugurado el festival.
Se presentarán 98 espectáculos -71 presenciales y 27 virtuales- a través de los nueve foros que privilegian el uso de los espacios al aire libre. Entre ellos destacan el concierto sinfónico con Bruno Axel y la Orquesta de Cámara Higinio Ruvalcaba; la Noche electrónica alemana, de Resom & Mareena; el repertorio de pop e indie del cantautor colombiano Esteman y el homenaje a Armando Manzanero bajo la interpretación de Tania Libertad.