Arqueólogos de varios países y en donde participa una mexicana descubrieron una ciudad maya que había permanecido oculta hasta la actualidad en México, se trata de un área con miles de estructuras prehispánicas y pirámides que señalaría en su tiempo una alta presencia de población maya al este de Campeche.
“Nuestro objetivo en este artículo es evaluar si la densidad general de asentamientos y la variabilidad a escala local en la densidad de asentamientos (es decir, la urbanización) han sido sobreestimadas por encuestas "centradas en el sitio" por motivos arqueológicos. Para hacer esto, reclutamos una nueva muestra de asentamientos a escala regional en uno de los "puntos en blanco" más grandes de las tierras bajas mayas: el este de Campeche, México”, revela el estudio compartido hoy en la revista Antiquity y que publica la Universidad de Cambridge.
Para lograr este descubrimiento los investigadores utilizaron una tecnología especial que permite escanear con láser superficies grandes, a larga distancia y crear mapas de alta precisión, principalmente para estimar la extensión de poblaciones y su urbanización; a esta herramienta se le conoce en el mundo de la arqueología como, “tecnología lidar”.
“Durante la mayor parte del siglo XX, la investigación arqueológica en el centro-este de Campeche y Quintana Roo adyacente fue escasa en comparación con otras partes de las tierras bajas mayas, de tal manera que la base de datos autorizada de sitios conocidos y geolocalizados muestra que grandes franjas de la región son esencialmente tierra incógnita”, dice la investigación.
Las 6 mil 674 estructuras mayas que se descubrieron, se ubican al este de Campeche a unos kilómetros de Calakmul incluso algunas estructuras conectan con cuevas que con el tiempo colapsaron.
“Es un complejo arquitectónico adyacente a un profundo sumidero que da acceso a un sistema de cuevas parcialmente colapsado”, se lee en el artículo arqueológico que además confirma que este hallazgo es la más grande que se ha reportado en la zona o informado por Belice y Guatemala.
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Los arqueólogos buscaron en un mapa del 2013 y con ayuda de la tecnología lidar, asentamientos mayas que no estuvieran documentados por los gobiernos e investigadores y su descubrimiento detectó más de 6 mil 600 estructuras mayas que no se conocían y que hoy dan pie a nuevas investigaciones.
“Los investigadores del siglo XX tenían razón en que el interior de Campeche es un paisaje sustancialmente antropogénico, deja claro que esta área también era, en algunos lugares, un paisaje urbanizado donde las poblaciones rurales se articulaban e interactuaban con ciudades abarrotadas”, dicen los investigadores en sus conclusiones.
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La investigación en un futuro se centrará en el trabajo de campo en los sitios recién descubiertos, y podría ser fundamental para resolver los problemas modernos que enfrentan el desarrollo urbano.
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