Lázaro Cárdenas es considerado como uno de los mejores presidentes de la República por sus numerosas aportaciones en distintas aristas al pueblo de México. Entre sus grandes acciones se encuentra el alojo humanitario que ofreció a miles de exiliados españoles que huyeron del gobierno ilegítimo del fascista Francisco Franco.
La Guerra Civil Española (1936-1939), fue un evento histórico que marcó a la España del siglo XX, ésta dio inicio luego de que los generales Emilio Mola y Francisco Franco iniciaran un golpe de Estado de la Segunda República Española que fue elegida democráticamente.
Mientras el bando republicano defendía el proceso democrático del Estado por medio de la Constitución vigente de 1931. La facción derechista fue apoyada en su causa ilegítima por la Iglesia y gran parte del Ejército español. Su misión era implementar un Estado totalitario.
En 1939, la resistencia republicana fue vencida por la fuerza totalitaria de Francisco Franco, quien instauró una dictadura militar que provocó el exilio de miles de españoles.
En aquellos años una ola de fascismo invadió Europa, la cual desembocó en la Segunda Guerra Mundial. El gobierno franquista recibió el apoyo de otros Estados totalitarios como la Alemania de Adolf Hitler y la Italia de Benito Mussolini.
Cabe mencionar que la Guerra Civil en España provocó la muerte de más de 200 mil personas, sin mencionar los atroces crímenes de guerra perpetuados por las autoridades franquistas, como la tortura y asesinatos brutales injustificados.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) señala que cerca de medio millón de españoles huyeron a Francia. No obstante, más de 15 mil fueron enviados a campos de concentración nazis después de 1940.
Entre 1939 y 1942, otras 25 mil personas huyeron de la España franquista en busca de que un país los recibiera como refugiados, momento en el que Lázaro Cárdenas alzó la mano para recibirlos en México.
¿Cómo ayudó Lázaro Cárdenas a los exiliados españoles?
Lázaro Cárdenas, considerado como uno de los mejores estadistas en la historia de México, consciente del problema humanitario en España, implementó en México una política de solidaridad internacional, mejor conocida como asilo político.
Fue así que inicialmente, en 1937, en pleno conflicto armado entre republicanos y golpistas, llegó a México cerca de 500 niños españoles que fueron bautizados como los Niños de Morelia debido a que llegaron a una escuela de dicha entidad.
En su momento, los padres de los NIños de Morelia pensaron que el conflicto no duraría más que sólo unos meses, no obstante la guerra se prolongó 2 años más y fueron derrotados por Franco. Lo que marcó el antecedente de una migración masiva de españoles a México después de 1939, año de la victoria franquista.
Cárdenas no reconoció el gobierno ilegítimo de Franco, medida que también tomaron países como Cuba y la URSS. Tras dicho posicionamiento, México recibió hasta a 25 mil exiliados que encontraron refugio y se establecieron en diversas regiones del país.
Al respecto, Mari Carmen Serra Puche, representante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ante la Cátedra del Exilio Español, señala que la llegada de los exiliados españoles a México representó una inyección de intelectuales que potenciaron múltiples disciplinas en el país, generando nuevas generaciones de investigadores y académicos de la propia UNAM, del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y de la Casa España (hoy Colegio de México).
La antropóloga relata para Gaceta UNAM que a México llegaron todo tipo de personajes instruidos como docentes, artistas, literatos, filósofos, economistas, juristas, científicos, arquitectos, ingenieros, médicos y químicos. Entre los que destacan figuras como:
- Luis Buñuel
- Enrique Díez-Canedo
- Ramón Xirau
- Félix Candela
- Pedro Bosch Gimpera
- José Giral
- José Puche
- Juan Comas
- Ignacio y Cándido Bolívar
- José Gaos
- Luis Recaséns Siches
- Remedios Varo
En contraste, de acuerdo con la historiadora española naturalizada mexicana, Dolores Pla Brugat (1954-2014), argumentó en su libro "Los niños de Morelia, un estudio sobre los primeros refugiados españoles en México", que el exilio republicano español no estuvo constituido solamente por la élite intelectual, es más, los exiliados no eran mayoritariamente intelectuales. Incluso la académica señala que pareciera que hay poco interés por saber qué pasó con esa mayoría.
Otro defensor de la imagen que se ha hecho de los refugiados es el propio Estado mexicano. Él fue su benefactor y el responsable de que ellos estén en México y, por supuesto, ha defendido siempre que la llegada de los exiliados significó un aporte importante al país argumentó Pla Brugat
Pla Brugat explica que sólo se ha la puesto atención a los refugiados intelectuales que destacaron en su nueva vida en México, pero que aquellos que no lo fueron han quedado en el olvido.
Cabe mencionar que la Guerra Civil Española fue el conflicto bélico más sangriento de Europa desde el final de la Primera Guerra Mundial.