El humor de Tin Tan y Cantinflas llega al Museo del Estanquillo

El humor en todos los tonos, desde el más simplón hasta el negro y sin faltar el político, es el protagonista principal de la exposición “¿Actuamos como lo que somos o como caballeros? El humor en el cine mexicano”, y el cual es interpretado por verdaderos generales de la comicidad secundados por una tropa loca de patiños infaltables y cómicos de la legua.

Dos pisos del Museo del Estanquillo en el Centro Histórico de la Ciudad de México, resultaron insuficientes para mostrar a otros tantos comediantes que han dejado huella en la historia humorística nacional, mientras que algunos se ganaron un lugar destacado en las batallas que dieron en carpas, teatros de revista, giras interminables por el país y el extranjero, películas y la televisión.

Exposiciones

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Salvo una mejor opinión, la escena en la que Alfonso Arau, Sergio Corona y La Vitola bailan sincronizadamente algunas danzas del segundo acto de El lago de los cisnes es la más desternillante que se proyecta en las pantallas que forman una parte importante de la presentación, que estará abierta hasta el 31 de enero de 2019.

Las historias de Cantinflas, Joaquín Pardavé y Tin Tan, verdaderos generales y vacas sagradas del humorismo, se llevan ellos solos una buena parte del primer piso de la exposición, que comparten con una introducción de los antecedentes del humor muy al estilo mexicano, que alcanzó su punto culminante en los diferentes géneros de las películas nacionales del siglo pasado y el presente.

La exposición está integrada por cientos de fotografías de películas, posters, vestimentas de los protagonistas y pantallas que exhiben momentos memorables de las cintas del humor mexicano, como Ahí está el detalle; mientras que Sara García tunde a bastonazos a Mantequilla en Los tres García, y Tin Tan cruza guantazos en una pelea desigual y divertida con Tuntún.

Asimismo, Joaquín Pardavé, como manager del boxeador y crooner Fernando Fernández, le pregunta, “¿entonces vamos a actuar como caballeros o como lo que somos? Y la respuesta es unánime “como lo que somos”.

En un apretado recorrido, se presentan la influencia de la comicidad extranjera, por ejemplo Charles Chaplin; y de ahí se brinca al humor nacido en el teatro de revista, con imágenes del Panzón Soto, uno de los principales comediantes del siglo pasado y quien fue papá de Fernando Soto Mantequilla.

Otro género antidiluviano muy de esta temporada es La Pastorela, como así se llama una película reciente y se presenta un segmento de un filme protagonizado por Lilia Prado y Mantequilla.

De golpe y porrazo, el visitante se enfrenta a la comedia ranchera, cuyo mejor ejemplo es la cinta Dos tipos de cuidado protagonizada por el par de monstruos de la música vernácula, Pedro Infante y Jorge Negrete quienes interpretan Las coplas del retache.

Danzón dedicado

Mario Moreno Cantinflas es el primer general cómico en pasar revista y en las pantallas se exhiben fragmentos de sus películas más célebres de su primera época, cuando era un comediante peladito forjado en las carpas de barrio, con Shilinsky como su patiño y Manuel Medel como compañero de andanzas.

A su forma de hablar, más bien cantinflear, Carlos Monsivais la describe de la siguiente manera “Todos los diálogos lo que intentan es rendir al interlocutor que, ante la incomprensión, acaba fatigado, desmayado y dispuesto a aceptar lo que el otro diga”.

Luego, viene un danzón dedicado a Cantinflas, en la que el mimo baila rítmicamente, con su pantalón a media nalga, pero sin enseñar los calzones, como ahora se estila, cruza la gabardina sobre su pecho y el sombrero se sostiene a pesar de que el bailarín quiebra la cintura a cada paso que danza y al final remata con un “no que no chato”-

El Gran Makakikus

El segundo en pasar lista es un comediante que nació prácticamente en las tablas, el guanajuatense Joaquín Pardavé, cuyo personaje más celebre fue Don Susanito Peñafiel y Somellera, el autonombrado secretario de don Porfirio Díaz.

Sin embargo, también interpretó al español Don Venancio o era el libanés el Gran Makakikus, el mandilón de corazón noble del que se aprovecha su familia y su esposa, Sara García; o el policía de Gendarme de punto.

Esos y otros personajes bailan Mambo que rico mambo, interpretado por Dámaso Pérez Prado; al final se comprueba que “vamos a actuar como lo que somos”.

El pachuco

Cierra esa primera parte de la exposición, el pachuco Germán Valdez Tin Tan” y al centro de esa parte de la muestra se presenta un traje de los que uso, en un color violeta, de estilo zoot suit, un saco que cae hasta las rodillas, su leontina, zapatos de dos colores y el infaltable sombrero con su pluma.

Bailarín de muy buena factura, como lo demuestra cuando baila con otros dos hombres en el El revoltoso, canta con sentimiento Piel canela y secunda a la Vitola en un aria de ópera desconocida.

La música y letra de la canción Personalidad cierra su presentación en esa parte de la historia de un personaje llegado de Ciudad Juárez, Chihuahua, hijo de Lupe la charra y al que en todas sus películas siempre estuvo acompañado de las mujeres más bellas de la época de oro del cine mexicano, como Silvia Pinal, Tongolele, Rosita Quintana, Carmelita González y Ana Bertha Lepe, entre otras.

Batallón

A pesar de que siempre fueron patiños, los integrantes de esta parte de la exposición fueron verdaderos gigantes de la comicidad entre ellos Óscar Pulido, Agustín Isunza, los Polivoces, Pompín Iglesias (¡qué bonita familia!), El Chicote et al.

El Piporro tiene un lugar destacado en esta parte de la exposición, se resalta su humor muy al norteño, y fragmentos de sus películas son exhibidas mientras que suena El taconazo.

Aquí también aparece el galán de galanes, Mauricio Garcés, que canta Soy tan hermoso ya lo vez.

Baila mi rey es la parte con la que se presenta “Resortes Resortín de la Resortera, para servirle a usted por donde quiera, como quiera y a la hora que quiera”.

Y en todo esto no podía faltar el humor negro y surrealista, con sus dos principales cintas El esqueleto de la señora Morales, protagonizada por Arturo de Cordova; y Ensayo de un crimen, cuya reseña es adornada con un maniquí de Miroslava Stern, la presunta víctima de Archibaldo o Ernesto Alonso.

Museo del Estanquillo

Calle Isabel la Católica 26, Centro, 06000 Cuauhtémoc, CDMX

¿Actuamos Como Caballeros O Como Lo Que Somos? El Humor En El Cine Mexicano, abierta al público hasta el 31 de enero