No sólo aumentaron las ventas, sino que también superaron las ventas de CD por primera vez desde 1988, según un nuevo informe de la Recording Industry Association of America.
¿Pero quién vio venir eso?
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Ciertamente yo no. A mediados de la década de 1990, vendí la gran colección de discos de mi familia sobre las protestas de mi esposa. La convencí de que necesitábamos el espacio, incluso si el comprador estaba recogiendo toda la mercancía por una canción.
En ese entonces, por supuesto, había muchas menos opciones para escuchar música: fue años antes del streaming y los teléfonos inteligentes.
Ahora doy clases en una escuela de negocios y sigo las últimas tendencias de la economía. Las ventas de discos han ido en aumento desde 2007, y los datos muestran que la recuperación de la industria de los discos de vinilo aún no ha alcanzado su punto máximo. El año pasado, la industria de la música vendió 41.3 millones de álbumes, más que en cualquier año desde 1988.
Este resurgimiento es sólo un capítulo de una historia más amplia sobre la creciente popularidad de las tecnologías más antiguas. No sólo están regresando los discos LP, sino también las máquinas de escribir manuales, los juegos de mesa y las cámaras digitales de finales de la década de 1990 y principios de la de 2000.
Hay muchas teorías sobre por qué los discos están volviendo. La mayoría de ellos pierden el punto sobre su atractivo.
¿Por qué viniles y no CD?
Una sugerencia es que las ventas han sido impulsadas por los baby boomers, muchos de los cuales ahora se jubilan y están ansiosos por aprovechar la nostalgia de su juventud.
Los datos muestran que esta teoría no es cierta.
Primero, los álbumes de vinilo más vendidos en este momento son de artistas actuales, no bandas clásicas. Al momento de escribir este artículo, Gorillaz, una banda formada a fines de la década de 1990, estaba en la cima de las listas de vinilos.
En segundo lugar, los datos de la industria discográfica muestran que la persona con más probabilidades de comprar un disco LP pertenece a la Generación Z: personas nacidas entre 1997 y 2012.
Otra teoría es que los discos son baratos. Si bien eso podría haber sido cierto en el pasado, los discos de vinilo de hoy tienen una prima. Cracker Island, el álbum de Gorillaz que actualmente encabeza las listas de ventas de vinilos, se vende por casi 22 dólares, el doble del costo del CD. Además, suscribirse a un servicio en línea como Spotify por 15 dólares al mes le da acceso a millones de pistas.
Una tercera explicación del resurgimiento es que la gente afirma que los discos tienen mejor calidad de sonido que los archivos de audio digital. Los registros son grabaciones analógicas que capturan toda la onda de sonido. Los archivos digitales se muestrean a intervalos periódicos, lo que significa que sólo se captura una parte de la onda de sonido.
Además del muestreo, muchos servicios de transmisión y la mayoría de los archivos de audio almacenados comprimen la información de sonido de una grabación. La compresión permite a las personas poner más canciones en sus teléfonos y escuchar servicios de transmisión sin usar mucho ancho de banda. Sin embargo, la compresión elimina algunos sonidos.
Si bien los discos LP no se muestrean ni comprimen, desarrollan sonidos de chasquidos, crujidos y estallidos después de reproducirse varias veces. Los registros también se saltan, algo que no sucede con la música digital.
Si realmente busca calidad, los CD suelen ser un formato digital superior porque los datos de audio no están comprimidos y tienen una fidelidad mucho mejor que los discos.
Sin embargo, a pesar de que los CD son de mayor calidad, las ventas de CD han ido cayendo constantemente desde su punto máximo en 2000.
El último símbolo de estatus
En mi opinión, la razón más probable del resurgimiento de los registros fue identificada por un economista hace más de un siglo.
A fines de la década de 1890, Thorstein Veblen analizó el gasto en la sociedad y escribió un libro influyente llamado La teoría de la clase ociosa.
En él, explicó que las personas a menudo compran artículos como una forma de ganar y transmitir estatus. Una de las ideas clave de Veblen es que no todo en la vida se compra porque es fácil, divertido o de alta calidad.
A veces, los artículos más difíciles, más lentos o exóticos ofrecen más estatus.
Un pastel es un gran ejemplo. Digamos que te ofreces a llevar un pastel a una fiesta. Puede comprar un pastel hecho en una panadería que se verá perfecto y sólo le tomará unos minutos comprarlo. O podrías hornear uno en casa. Incluso si es delicioso, no se verá tan bien y llevará horas prepararlo.
Pero si tus amigos son como los míos, se entusiasmarán con el pastel casero y no mencionarán el perfecto comprado en la tienda.
Comprar y reproducir discos de vinilo se está convirtiendo en un símbolo de estatus.
Hoy en día, tocar música no requiere esfuerzo. Simplemente, grite su solicitud en un altavoz inteligente, como Siri o Alexa, o toque una aplicación en su teléfono inteligente.
Reproducir un disco en un tocadiscos requiere tiempo y esfuerzo. Construir su colección requiere una deliberación cuidadosa y dinero. Un cubo de almacenamiento de discos junto con un tocadiscos que lo acompaña también es una bonita decoración para la sala de estar.
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Y ahora yo, el profesor poco cool que soy, me encuentro lamentando la pérdida de todos esos álbumes que vendí hace años.
*Jay L.Zagorsky, Académico de la Universidad de Boston
