La escultora mexicana Ángela Gurría, referente en la historia del arte moderno en México, falleció este viernes a los 93 años de edad.
A través de sus redes sociales, la Secretaría de Cultura lamentó el deceso de la artista, quien fue la primera mujer miembro de la Academia de Artes, reconocida en 2015 con la Medalla Bellas Artes y en 2013 con el Premio Nacional de Ciencias y Artes.
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Por su parte, Alejandra Frausto, titular de la Secretaría de Cultura, envío sus condolencias a familia y amigos, destacando el trabajo de la mexicana que se volvió un referente mundial en la escultura abriendo paso a las mujeres.
Entre otros reconocimientos que recibió están el Premio del Instituto de Arte en México, la Medalla de Oro de la Academia del Arte de Lavoro en Italia y el Primer Premio de Escultura Integrada a la Arquitectura de la Bienal Mexicana de Escultura.
Ángela Gurría: su obra más importante
Ángela Gurría, nacida en la Ciudad de México en 1929, fue alumna del escultor Germán Cueto, introductor del abstraccionismo dentro de las formas escultoras en el país, de acuerdo con la Galería Arte Hoy, donde se exponía y vendía su obra.
Su trayectoria que se caracterizó por una gran producción artística, calidad estética, cualidades plásticas y fuerza crítica que finalmente fueron un referente en la historia de la plástica mexicana.
Invitada por Mathias Goeritz a participar con su obra "Señal" en la Ruta de la Amistad, un corredor donde se colocaron varias obras en homenaje a los Juego Olímpicos de 1968 en México .
Su escultura fue colocada en la Estación No. 1 de dicho proyecto sobre la glorieta de San Jerónimo, siendo una de las más importantes de su carrera, pero luego fue trasladada a la intersección del Anillo Periférico con Avenida Insurgentes Sur, aledaña a Ciudad Universitaria.
La obra "Señal" ha sido descrita como "una de las esculturas de arte moderno más importantes de la segunda mitad del siglo XX".
El lenguaje formal de Ángela Gurría abarcaba desde el geometrismo hasta la síntesis de las formas orgánicas con cierta influencia prehispánica al emplear iconografía arraigada en la escultura mexica como fueron las mariposas y calaveras.
Cada una de sus creaciones han formado parte del inconsciente colectivo escultórico dentro y fuera de la Ciudad de México.
Fuera de la capital metropolitana levantó símbolos urbanos como el de la Ciudad de Tijuana titulado "Monumento a México".
Otras obras suyas de importante carga visual y cultural son "Río Papaloapan", ubicada en el vestíbulo del Museo Nacional de Arte de la CDMX y "Nube", en el vestíbulo de la librería del mismo recinto.
En su momento el maestro Luis Martín Lozano dijo: "Con perspectiva habría que decir que Ángela Gurría es la última de los clásicos y la primera de los contemporáneos pues guarda un lugar de primerísimo orden en la historia del arte moderno mexicano”.
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Su obra, tanto pública como privada, queda como evidencia de la gran relevancia que la escultura mexicana ha tenido y seguirá teniendo en la historia del arte.