Nueva York, EU.- Dos irlandesas, Yvonne Farrell y Shelley McNamara, fueron recompensadas este martes con el prestigioso premio Pritzker, considerado el equivalente al premio Nobel de la arquitectura, por su maestría a la hora de equilibrar fuerza y delicadeza integrando los elementos naturales.
Educadoras y arquitectas de Dublín que trabajan juntas desde la década de 1970, Farrell y McNamara "crean espacios que son a la vez respetuosos y nuevos, honrando la historia al tiempo que demuestran un dominio del ambiente urbano y el oficio de la construcción", dijo en un comunicado la Fundación Hyatt, que auspicia el premio.
Es la primera vez que el Pritzker es otorgado a un dúo de mujeres.
"Pioneras en un campo que tradicionalmente ha sido y aún es dominado por hombres, son también faros para otras mujeres al forjar su camino profesional ejemplar", dijo el jurado.
Los edificios de Yvonne Farrel y Shelley McNamara se inscriben en la corriente del brutalismo, un movimiento en el que destaca el uso de materiales como el hormigón o el ladrillo, carente de adornos, y que tienen al ciudadano como centro de su diseño.
Farrel y McNamara crean espacios que son a la vez respetuosos y nuevos, honran la historia y demuestran un gran dominio del entorno urbano y de la artesanía de la construcción, con un difícil equilibrio entre fuerza y delicadeza. Así lo señala el jurado del Pritzker y así queda reflejado en sus obras más destacadas:
Universita Luigi Boconi (Milán, Italia, 2008)
Farrel y McNamara, que combinan la docencia con la arquitectura, han diseñado muchos edificios de universidades.
En el caso de la de Milán, las irlandesas decidieron dedicar la planta baja como espacio público, para fomentar la relación entre la comunidad educativa y la vibrante ciudad italiana. Fue galardonado con el premio al Edificio del Año en el World Architecture Festival de 2008.
Oficinas del Department of Finance (Dublín, Irlanda, 2009)
Aunque poco llamativo desde el exterior, el edificio es uno de los más destacados de su trayectoria. Para recubrirlo usaron en el exterior piedra caliza local en gruesos paneles, lo que le imprime fortaleza.
Las ventanas están empotradas y a ras de fachada, con respiraderos en la zona inferior, que ofrecen vistas panorámicas de la ciudad. El edificio tiene detalles de bronce en barandillas y en la puerta principal.
Université Toulouse 1 Capitole (Toulouse, Francia, 2019)
Farrel y Shelley eligen cuidadosamente los materiales con que realizan sus edificios. En este caso la arena para construirlo fue extraída del cercano Lago Iseo y su diseño, que incluye contrafuertes, rampas y patios, es una metáfora de la ciudad francesa, que también está llena de puentes, muros, paseos y torres de piedra.
Solstice Arts Centre (Navan, Ireland, 2007)
Las arquitectas diseñaron este centro de arte en una pequeña ciudad y capital del condado irlandés de Meath. Recubierto de cristal y ladrillo, el edificio es una imponente estructura geométrica que se ilumina de noche.
Las arquitectas diseñaron en su interior un teatro ideado para crear una sensación física de cercanía entre la audiencia y los artistas o intérpretes que actúan en el escenario.
Institut Mines-Télécom (París, 2019)
Uno de los últimos proyectos de Farrel y McNamara es este complejo universitario que se integra en el paisaje con una imponente fachada gris que se confunde con el terreno donde está ubicada.
Llena de claustros, pasillos y líneas cuadradas, logra mimetizarse con su entorno pese a su tremenda presencia y tamaño. Los edificios se ordenan alrededor de seis espacios, cinco de ellos son patios, uno de los cuales está semicubierto.