Senado rinde un minuto de silencio en memoria de Miguel León-Portilla

Historiador, lingüista y humanista fue uno de los estudiosos e historiadores de mayor prestigio nacional e internacional

Gabriel Xantomila y Jacob Sánchez | El Sol de México

  · jueves 3 de octubre de 2019

Foto: Cuartoscuro

El Pleno del Senado rindió un minuto de silencio en memoria del maestro Miguel León Portilla, quien falleció el pasado primero de octubre pasado a los 93 años.

Historiador, lingüista y humanista fue uno de los estudiosos e historiadores de mayor prestigio nacional e internacional sobre las culturas indígenas de México y en general un gran especialista en temas de la época prehispánica.

La presidenta de la Mesa Directiva, Mónica Fernández Balboa indicó que fue un hombre de letras que ocupará un lugar permanente en nuestra historia, al haber dedicado su vida a explorar en los vestigios y realidades de nuestra cultura y defenderlos como una herencia que fortalece lo más valioso de nuestro propio ser.

Dijo que México y la comunidad académica extrañarán a un ser que por décadas fue un faro que ilumino el camino de los estudios de las raíces indigenistas de nuestro país, en su pasado y presente.

Aseveró que hoy en el Senado se honra el recuerdo de un mexicano entregado a la pasión del conocimiento histórico, don Miguel León Portilla, traductor, académico de primer nivel, historiador, lingüista y arqueólogo del saber humano.

Recordó que León Portilla fue maestro universitario egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México y miembro de su Junta de Gobierno. Fue también, dijo, integrante de la Academia Mexicana de la Lengua, de la Academia Mexicana de Historia y del Colegio Nacional.

Se desempeñó como director del Instituto Indigenista Interamericano y del Instituto de Historia de la UNAM, agregó.

“Don Miguel León Portilla fue autor entre otras obras de: 15 poetas de mundo azteca; la visión de los vencidos; el conocedor de la filosofía náhuatl, y un investigador acucioso que estudiaba en sus fuentes”, subrayó la presidenta de la Cámara Alta.

Asentó que su paso por la historia y construcción de este país fue reconocido por la Cámara de Senadores en 1995, habiéndole entregado el máximo galardón (Belisario Domínguez) que otorga esta Soberanía como reconocimiento realizado a lo largo de su fecunda existencia.

Los enseñó a creer en lo nuestro, a no negar lo indígena. A tener orgullo de su sangre y de su herencia. Extrañaremos a un mexicano ilustre, concluyó.