De cara al acelerado avance de los modelos de Inteligencia Artificial (IA) en el mundo, expertos en programación y computación coincidieron en la importancia de que México invierta más en su soberanía tecnológica como una prioridad nacional.

Así sucedió durante el conversatorio “De qué hablamos cuando hablamos de IA”, como parte de las actividades de la octava edición de El Aleph. Festival de Arte y Ciencia, organizado por la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM (Cultura UNAM).

“Aquí tenemos un gran reto de nosotros como nación convertirnos en generadores de ciencia y tecnología, no para competir, porque no es un tema chovinista, sino para participar como actores en el mundo, para dar al mundo y recibir de él”, dijo el ingeniero Luis Alberto Pineda, doctor por la Universidad de Edimburgo, quien explicó que la IA, entre sus múltiples acepciones, puede entenderse como una especie de prótesis para poder analizar grandes cantidades de información.

“Es un asunto de seguridad nacional y yo pienso que ahí sí tenemos mucho que hacer, pues no creo que se esté conceptualizando de manera adecuada. Ha habido estrategias nacionales que en el fondo sólo son económicas, pero no se dan cuenta (los gobiernos) de que están siendo los clientes”, agregó el también presidente fundador de la Academia Mexicana de Computación.

Ventaja inalcanzable

En el mismo sentido, el arquitecto de Tecnologías de la Información, David Sol, habló sobre los riesgos a los que las sociedades modernas se tendrán que preparar en los próximos años, como estafas orquestadas con IA y desplazamiento laboral masivo. También habló del creciente interés de gobiernos y empresas por el desarrollo de tecnologías de IA cada vez más avanzadas, las cuales pueden tener repercusiones geopolíticas importantes.

“Qué vamos a hacer si una organización o un país es capaz de desarrollar una inteligencia artificial capaz de mejorarse a sí misma, más rápido de lo que nosotros lo hacemos. La primera organización o el primer gobierno que lograra hacer algo así tendría una ventaja tecnológica inalcanzable para cualquier otro”, aseguró el especialista, quien ha trabajado en la gestión de datos de empresas como Coca-Cola.

Por su parte, el ingeniero Gibrán Fuentes. doctor en Sistemas de Información por la Universidad de Electro-Comunicaciones de Tokio, comentó que los riesgos de la IA no necesariamente se encuentran en escenarios apocalípticos a futuro, sino en problemas actuales como el sesgo de datos e información que pueden mostrar los distintos modelos de IA, de los cuales cada vez dependen más servicios en los que se almacenan datos de los individuos.

Como todos los expertos presentes, el investigador Caleb Rascón, Premio a la Innovación en la competencia RoboCup@Home Holanda 2013, apuntó que las IA al final de cuentas son máquinas que procesan datos e información que es aportada por humanos y que solucionan tareas específicas como herramientas que son.

Por esta razón considera que si existen herramientas de IA que lastimen, ofendan o signifiquen algún tipo de amenazas para seres humanos debe cuestionarse a sus programadores o las fuentes, al final humanas, de las que obtuvieron la información.