En aquel momento nadie lo podía predecir, pero estaba por nacer una leyenda. Después de publicar dos sencillos con los que apenas llamó la atención ("Everybody", el 6 de octubre de 1982 y "Burning Up", el 9 de marzo de 1983), tras el lanzamiento del disco de título homónimo, el siguiente sencillo promocional arrojaría más luz sobre el fenómeno que estaba a punto de despertar: La canción "Holiday", que se lanzó como sencillo oficial unas semanas después, pondría frente a nuestros ojos y oídos el nacimiento de una estrella cuyo brillo no se apagaría por décadas.
Ahí comenzó la leyenda, en parte planeada y escrita meticulosamente por la propia artista, quien no descansaría hasta colarse en todas las radios, en todas las televisiones y en todas las portadas de las revistas juveniles.
Recomendado para ti: #SOY | George Michael, seis décadas de genialidad
Así, a fuerza de permanencia en esta carrera de resistencia llamada industria de la música, Madonna esculpió su propia leyenda, y su estatus de icono cultural y sexual, que aún hoy, 40 años después, sigue siendo un referente para las nuevas generaciones.
Y aunque seguramente no lo planeó así, justo cuando la cantante se recupera de problemas de salud, se cumple este aniversario del disco que fue su honrosa carta de presentación.
¿Pero de qué se trata aquel primer disco y por qué sigue siendo relevante todavía, tanto tiempo después de su lanzamiento?
El crítico Stephen Thomas Erlewine dijo en su momento que con este álbum, Madonna tuvo un papel muy importante en la popularización de la música dance como música convencional, “utilizando su carisma, descaro y atractivo sexual”. Para él, cuando la artista lanzó su propuesta de dance-pop, estableció el estándar para el género durante las próximas dos décadas, algo en lo que coincidía la revista Vice, cuando dijo que este disco trazó el modelo para el futuro dance-pop.
La revista Rolling Stone clasificó este álbum en el puesto 50 de su lista de los 100 mejores álbumes de los años ochenta, y dijo que esta grabación tiene un estilo y sonido seguros, así como el enfoque inteligente de Madonna para los videos, que la ayudaron a dar el salto de diva del baile a fenómeno del pop, “logrando introducir la voz femenina más importante en la historia de la música moderna"
De acuerdo con el biógrafo Andrew Morton, este primer álbum convirtió a Madonna en un nombre familiar y fue fundamental para presentar su poder de convocatoria. Pero la revista Entertainment Weekly fue más allá al vaticinar: "El sonido de Madonna y, por supuesto, su apariencia, serían muy copiados en los próximos años, pero Madonna anunció algo mucho más grande: la llegada de la diva del pop como una fuerza singular que puso la personalidad por encima de todo".
Los ingredientes de su éxito
Según el autor Santiago Fouz-Hernández, las canciones de la artista revelan varias tendencias clave que han seguido definiendo su éxito hasta el día de hoy, incluido un lenguaje fuerte basado en la danza, ganchos pegadizos, arreglos muy pulidos y el propio estilo vocal de la cantante.
“En canciones como "Lucky Star" y "Burning Up", Madonna introdujo un estilo de música dance optimista que resultaría especialmente atractivo para el futuro público gay”.
Y los videoclips, que precisamente a principios de los años ochenta comenzaron a cobrar tanta relevancia como instrumentos efectivos de promoción de la música, también fueron esenciales en el caso de Madonna.
La autora Carol Clerk señaló que los videos de "Burning Up", "Borderline" y "Lucky Star" establecieron a la artista no como la chica de al lado, sino como una mujer atrevida, inteligente y divertida.
De hecho, la ropa que usó en esos videos fue utilizada más tarde por diseñadores como Karl Lagerfeld y Christian Lacroix, en la Semana de la Moda de París del mismo año.
En ese mismo sentido, el profesor Douglas Kellner, en su libro Media Culture: Cultural Studies, Identity, and Politics Between the Modern and the Postmodern, apuntó que los videos mostraban motivos y estrategias que ayudaron a Madonna en su viaje para convertirse en una estrella.
Con el video musical "Borderline", a Madonna se le atribuyó el mérito de romper el tabú de las relaciones interraciales, y se consideró uno de los momentos decisivos de su carrera. La cadena MTV reprodujo el video con mucha rotación, lo que aumentó aún más la popularidad de la autodenominada “Reina del Pop”.
Una carrera de resistencia
Evidentemente, no todo fue miel sobre hojuelas desde el principio. A la artista le tomó no uno, sino varios discos ganarse el respeto y la credibilidad, sobre todo de parte de un sector de la crítica especializada, que en un principio la veía como una estrella fugaz, una artista de temporada.
Desde el comienzo de mi carrera, la gente ha estado escribiendo mierda sobre mí
Tras el lanzamiento de aquel primer álbum, algunos críticos también la rechazaron, dijeron que su voz sonaba como la de "Minnie Mouse, pero en helio", y otros sugirieron que ella era "casi completamente helio, una creación llena de gas y más liviana que el aire de MTV y otros empaquetadores de medios siniestros".
Ella por su parte, se limitaba a decir: "Desde el comienzo de mi carrera, la gente ha estado escribiendo mierda sobre mí y diciendo que soy una maravilla de un solo golpe, que desapareceré después de un año”.
Veinticinco años después, cuando se le introdujo al Salón de la Fama del Rock and Roll, Madonna no perdió la oportunidad de agradecer a los críticos que la despreciaron en sus primeros años:
"Los que decían que no tenía talento, que era gordita, que no podía cantar, que era un one hit wonder, me empujaron a ser mejor y estoy agradecida por su resistencia”.
Aún hoy en día tiene muchos detractores, pero también mucha aceptación no sólo en el mundo de la música pop, sino en prácticamente cualquier ámbito de la vida pública.
➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo
Algún talento debió tener la mujer para saber rodearse siempre de los mejores talentos y para mantenerse en pie, en esta carrera de resistencia llamada industria de la música, una carrera en la que ya dejó atrás a rivales a los que parecía imposible vencer en los años ochenta, como Prince y Michael Jackson.
Por todo ello, el mejor homenaje que le podamos hacer, es escuchar de nuevo su música, por ejemplo, un disco completo, como este que el día de hoy cumple 40 años, nada más.