Los doodles de Google se han convertido en el muro virtual de las efemérides del mundo. Hoy el buscador rinde un homenaje a Librado Silva Galeana con un marco color verde jade, con motivos de la cultura azteca, a la cual le debió su tiempo y estudios toda su vida.
Librado Silva fue un importante académico y promotor de la cultura náhuatl. Nació el 12 de agosto de 1942, en Santa Ana Tlacotenco, delegación de Milpa Alta en el entonces Distrito Federa; aprendió el náhuatl de su madre doña Margarita Galeana y su padre Gregorio.
Su vida académica comienza como estudiante normalista, ya egresado se dedicó al magisterio en asignaciones con niños que conocían el náhuatl.
En 1975, junto con otros compañeros también maestros nahuas, fundó el Círculo Social y Cultural "Ignacio Ramírez", en el que sus miembros se reunían para intercambiar sus conocimientos y su aprecio por su lengua materna.
En 1982 entabló una profunda amistad con su maestro, Miguel León-Portilla en un homenaje en la entonces Escuela Nacional de Estudios Profesionales de Acatlán. Desde entonces, Librado Silva junto con Francisco Morales Baranda se convirtieron en colaboradores con León-Portilla en la revista Estudios de Cultura Náhuatl de la UNAM.
En sus relatos, presentados en español y en náhuatl, los temas principales son las tradiciones y la forma de vida en comunidades indígenas, dice una ficha del autor en la Enciclopedia de la Literatura en México.
En “La víspera del día de muertos” , publicado en Estudios de cultura Náhuatl número 18 de 1986, cuenta los años de juventud de un viejo que lleva flores a la tumba de su esposa; los recuerdos de su primer encuentro, el amor y su relación como pareja se mezclan con la descripción de la vida y de las costumbres de los pueblos indígenas.
"En el lugar de las águilas" se narra la historia de Liborio y Xóchitl, quienes al recoger pastura de un terreno que ya no pertenece a su comunidad, sino a otra, desatan rencores y odios que provocan una tragedia, agrega la mencionada enciclopedia.
Librado Silva murió 29 de abril de 2014 debido a una prolongada enfermedad consecuencia de su estado diabético.
“El recuerdo del maestro Silva Galeana permanecerá unido al de sus obras y discípulos. Fue un hombre que trabajó incansablemente en pro de las raíces más hondas de la cultura mexicana”, escribió Miguel León-Portillo en su obituario.
