Luego de los retiros del quarterback Carson Palmer y el coach Bruce Arians, los Cardenales de Arizona enfrentan la temporada 2018 con la intención de reinventarse y pelear por un lugar en la postemporada.
La cosas no serán fáciles para los Cardenales. Son muchas las incógnitas que aún deben resolver para ser considerados contendientes, al menos para pelear por su división. Es un hecho que la principal fortaleza se encuentra en su ataque terrestre. David Johnson vuelve con sed de revancha, luego de perderse la temporada pasada por una fractura en la muñeca.
En cuestión aérea, los Cardenales llevaron a sus filas al experimentado marsical de campo Sam Bradford, quien buscará mantenerse sano para demostrar que aún tiene cosas por dar en la liga. Atrás, Josh Rosen, quarterback de primer año y el cual fue la décima selección global del Draft, esperará paciente su turno.
La tarea para el coach Steve Wilks en su debut con Arizona presenta grandes retos. ¿Será capaz de llevar a los Cardenales a ganar su primer Super Bowl? Ya se verá, en primera instancia, los apostadores lo colocan como el último lugar de su sector.