Después de la terrible inundación sufrida el pasado 28 de junio, la planta armadora de automóviles de Honda ubicada en Celaya, Guanajuato la cual produce dos de los modelos más emblemáticos de la marca, HR-V y FIT reanuda sus operaciones finalmente.

Las fuertes lluvias que provocaron que el río Laja se desbordara, ocasionaron que su producto quedara totalmente inservible. Por lo cual, todas las unidades dañadas fueron destruidas. Con este anuncio se d el banderazo para el reinicio de producción de los nuevos modelos 2019, tanto de HR-V como de FIT, que salen nuevamente de la línea de ensamble. Cabe recalcar que se hacen 720 unidades al día. “Estamos muy contentos y entusiasmados por el reinicio de producción de nuestra planta de Celaya”, dijo Hiroshi Shimizu, presidente de Honda de México.

Honda y sus asociados se encuentran muy satisfechos con el anuncio, ya que se cumple con el compromiso con México, la red de distribuidores, clientes y proveedores, al reintegrarse como una pieza importante en la producción mundial de la marca. Fueron cuatro meses e intensos trabajos de los asociados, con el apoyo del equipo global de expertos de Honda para reparar los equipos y tener listas las instalaciones. Desde el 15 de noviembre la operación está a todo vapor y trabajando al ritmo regular de producción que se tenía.

En la planta de Celaya, además de la línea de ensamble de vehículos nuevos se producen motores para las unidades que se ensamblan tanto localmente como en la planta en El Salto, Jalisco. Además, se anunció que se levantará una muralla alrededor de la planta con la finalidad de evitar afectaciones a la producción en caso de otras inundaciones.

Destacado:

El fenómeno natural que azotó la planta armadora dejó una pérdida de 363 millones de dólares.