Este martes, se dio a conocer que la disputa legal entre Sergio Pérez y MGI Asistencia Integral, empresa afiliada a PEMEX, llegó a su fin después de dos años. El resultado de la demanda fue a favor del piloto de Fórmula 1 el cual recibirá 2.8 millones de dólares, esto de acuerdo con un documento revelado por ESPN.
“Se condena a la demandada a pagar al actor la cantidad de USD 2’800,000.00 (dos millones ochocientos mil 00/100 dólares de los Estados Unidos de América), o su equivalente en moneda nacional al tipo de cambio que impere en la fecha de pago; lo que deberá realizar dentro del término de cinco días siguientes al en que sea ejecutable la presente sentencia”, cita el documento.
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El conflicto se dio debido a un incumplimiento de contrato en el patrocinio de la filial privada. Checo demandó por más de 56 millones de pesos a la empresa después de que dejara a un lado un convenio que firmaron en 2018, cuando el tapatío corría para la escudería de Formula 1 Force India.
Durante algunas campañas el logo de PEMEX lució en el casco y el monoplaza del corredor. Con el cambio de gobierno de Enrique Peña Nieto a Andrés Manuel López Obrador, ese patrocinio quedó cancelado, lo que causó que Pérez decidiera emprender medidas legales.
Para la campaña 2019, el emblema de la petrolera nacional desapareció del vehículo Racing Point y comenzó la batalla en los juzgados. Un tribunal federal determinó darle la razón al piloto, por lo que MGI Asistencia Integral deberá desembolsar el dinero.
A mediados de marzo de 2021, salió a la luz que Checo tenía un proceso legal de dos años con PEMEX, ahora, a seis meses de que la disputa se volviera pública, se confirmó su victoria.
Después de que en junio trascendiera que todo se inclinaría a favor del jalisciense, los abogados de la compañía trataron de imponer un recurso de revocación, sin embargo, esta medida fue rechazada.
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El piloto de la Fórmula 1 ganó la demanda a poco más de un mes de que se dispute el Gran Premio de México. Antes de eso, la categoría reina hará escalas en Turquía y Estados Unidos.
Los 2.8 millones de dólares equivalen a poco más de un cuarto del salario base que le paga Red Bull, el cual se estima en 8 MDD.