Cuando todo parecía calmado, Saúl “Canelo” Álvarez y Daniel Jacobs calentaron los ánimos previo a la pelea de este sábado en Las Vegas. Ambos boxeadores cumplieron con el peso y fue a la hora del tradicional cara a cara cuando estuvieron cerca de llegar a los golpes.
El peleador norteamericano fue el primero en pegar su frente con la de Canelo.
Como era de esperarse, el mexicano no se dejó y de ahí se derivó un tenso momento donde ambos boxeadores se empujaron. Los presentes tuvieron que intervenir para separarlos y evitar que el incidente llegara a mayores.
Al término del pesaje, Saúl, visiblemente molesto, mandó un mensaje contundente a su contrincante:
Está asustado y solo diré una cosa, que ching… a su madre
Tanto Álvarez como Jacobs cumplieron sin problema alguno con el peso y se declararon listos para su combate en el que unificarán los cetros pesos medios de la AMB, WBC y FIB, también se jugarán los títulos The Ring y Maya.
El primero en pasar a la romana fue Jacobs y marcó un total de 160 libras.
En su turno, Canelo registró 159 libras y con ello ambos cumplieron con su compromiso que se efectuará la noche del sábado en la T-Mobile Arena en Las Vegas.
En caso de salir vencedor, el mexicano tendría tres títulos de las 160 libras y solo le faltaría el de la OMB para concretar su próximo gran objetivo, que es unificar los cuatro cetros de una división, lo que nunca ha hecho un pugilista mexicano.
Pero no será nada sencillo ante el llamado “Hombre Milagro”, quien en 2011 sobrevivió al cáncer y ahora se presenta como uno de los rivales más complicados en la trayectoria del tapatío, listo para exigir el nombramiento del mejor peso mediano de la actualidad.
Las cualidades de Jacobs son diversas y van desde pelear con ambas guardias, su fuerza, velocidad, además de ser más alto que el mexicano, pero en el equipo del “Canelo” están conscientes de todo y confiados en la preparación que se hizo.