La Paz.- El Gobierno de Bolivia afirmó hoy que la culpa delaccidente de aviación que le costó la vida en Colombia a 71personas es de la aerolínea boliviana Lamia y del piloto de laaeronave que se estrelló, Miguel Quiroga, fallecido en elsiniestro.
"Lo que ha acontecido con este trágico evento esresponsabilidad directa de la empresa Lamia y el piloto", dijo hoyen una rueda de prensa el ministro de Obras Públicas y Servicios,Milton Claros, al presentar los resultados de una investigacióngubernamental.
En el accidente murieron casi todos los jugadores de laplantilla del club brasileño Chapecoense y quedaron con vidaseis personas.
No obstante, según Claros, su Ministerio también estáasumiendo acciones para sancionar los actos de responsabilidad deservidores públicos "por algunas omisiones que se hanpresentado".
La directora general de Asuntos Jurídicos de ese Ministerio,Lenny Cáceres, ratificó que también está procesada lafuncionaria de la Administración de Aeropuertos y ServiciosAuxiliares a la Navegación Aérea (AASANA) Celia Castedo porincumplimiento de funciones, y un responsable inmediato de latécnica por no haber advertido de los errores detectados en elplan de vuelo de Lamia.
El Gobierno también ha ampliado querellas contra quienes fueronmáximas autoridades de la Dirección General de Aeronáutica Civil(DGAC), César Varela, y de AASANA, Tito Gandarillas, suspendidosde sus cargos tras el accidente del avión a fines denoviembre.
Gandarillas afronta un sumario administrativo y está acusado deincumplimiento de deberes, mientras que Varela fue sindicado por"omisión de denuncia" por no haber hecho conocer la relaciónentre el director nacional de Lamia, Gustavo Vargas Gamboa, y elexdirector de Registro Aeronáutico Nacional de la DGAC, GustavoVargas Villegas.
Según Cáceres, Vargas Villegas supuestamente incurrió "en losdelitos de incumplimiento de deberes, uso indebido de influencias ynegociaciones incompatibles con el ejercicio de la funciónpública".
Ambos, que son padre e hijo, están presos de formapreventiva.
En la rueda de prensa, el director de Transporte Aéreo, AndyRocabado, señaló que Lamia consiguió los permisos ycertificaciones según el reglamento, aunque pudo incurrir entráfico de influencias porque fue Vargas Villegas quien supervisótodo ese proceso.
Tanto la tripulación como la aeronave de Lamia tenían suscertificaciones en regla y Rocabado especificó que respecto alcombustible, es el piloto el que "tiene que verificar que ladotación total no sea igual a la autonomía de vuelo".